Recomienda Alan Greenspan al Gobierno ajustar el “cinturón” del gasto.
Agencias
Washington, EU.- El presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, reiteró la necesidad de que el Gobierno Federal ejerza una mayor restricción presupuestal, frente a los riesgos que se avizoran en el horizonte económico de Estados Unidos.
En una audiencia ante el Comité de Presupuesto del Senado, Greenspan se pronunció a favor de la readopción de una regla que requería que cada gasto nuevo fuera compensado con recortes, y que fue abandonada a raíz del superávit de principios de los años 90.
“Restablecer una estructura como esa sería una señal de renovado compromiso de restricción fiscal y ayudaría a restaurar la disciplina en el proceso anual”, indicó.
Empero, Greenspan reiteró la necesidad de que el Gobierno ajuste el cinturón de gastos, al apuntar que readoptar esta regla no sería suficiente para disipar los temores que existen sobre el crecimiento de la economía.
En su testimonio, el jefe de la política monetaria y fiscal de Estados Unidos indicó que el favorable desempeño económico de 2004 tiene ahora frente a si las preocupaciones “por los prospectos del presupuesto federal”.
El mes pasado el presidente George W. Bush sometió al Congreso su propuesta de presupuesto para el año fiscal 2006 que proyecta un gasto de dos mil 500 billones de dólares, y el cual resultara a su vez en un déficit de 427 mil millones de dólares.
Al respecto, Greenspan señaló que las proyecciones sobre el crecimiento del déficit, algo que ha generado preocupaciones fuera de Estados Unidos, no ayudaran a mejorar la posición presupuestaria “a menos que se adopten acciones para reducirlo”.
Sus palabras refutaron la noción de la Casa Blanca y el propio Bush en el sentido de que la economía mantendrá su ritmo de crecimiento a pesar del lastre que el déficit le significa.
“Responder a los desajustes del Gobierno requerirá escrutar el gasto y los impuestos, pero elevar impuestos para hacer frente a nuestros problemas fiscales, presentará riesgos significativos al crecimiento y la base tributaria”, advirtió.
Con relación a la magnitud del riesgo dijo que “la magnitud exacta de tales riesgos es muy difícil de calcular, pero, a mi juicio, son lo suficientemente preocupantes como para justificar, siempre que sea posible, cerrar la brecha fiscal principalmente, si no toda, por lo menos por el lado de los gastos”.
Greenspan reiteró el respaldo a la idea de reestructurar el sistema de jubilación de Seguridad Social para incluir cuentas de inversiones personales.
El programa del Gobierno enfrenta graves obstáculos financieros en las próximas décadas a medida que la generación de la posguerra comienza a jubilarse.
El jefe de la Fed también dijo que el crecimiento sólido en la productividad, o producción del trabajador por hora de bienes y servicios, contribuirían a aliviar las presiones presupuestarias.
“Pero a menos que el crecimiento de la productividad supere aquel incluido en los pronósticos presupuestarios actuales, es poco probable que responda a más que una parte de la pregunta”, djo Greenspan, quien añadió que no podía descartar la posibilidad de que el crecimiento de la productividad no llegue a ser igual a las proyecciones.
Benéfica depreciación
La economía de Estados Unidos puede estar creciendo más rápidamente que sus pares industrializadas,
pero paradójicamente el motor de ese crecimiento está también impulsando la caída del dólar en los últimos
tres años, dijeron analistas.
- El insaciable apetito por gastar de los consumidores estadounidenses lleva a que las importaciones de Estados Unidos de productos del resto del mundo se transformen en un déficit récord comercial y de cuenta corriente.
- Las preocupaciones acerca de por cuánto tiempo los extranjeros estarán dispuestos a financiar la fiesta de gastos de los consumidores estadounidenses han pesado sobre el dólar desde 2001.
- El año pasado, Estados Unidos absorbió el 80 por ciento de los ahorros a nivel mundial, los cuales ayudaron a financiar los déficit fiscal y de cuenta corriente estadounidenses, según el banco de inversión Goldman Sachs.
- El déficit del presupuesto federal de Estados Unidos durante el pasado año fiscal se ubicó en 412 mil millones de dólares, o 3.8 por ciento del Producto Interno Bruto, y debería ampliarse a 427 mil millones de dólares este año, según estimaciones del Gobierno.
- El déficit de cuenta corriente de Estados Unidos estaba en cerca de 670 mil millones de dólares, o 5.7 por ciento del PIB, según estimaciones del la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
- “Es difícil ver una moneda, la cual tiene un déficit de cuenta corriente de seis por ciento del PIB, apreciándose en el mediano plazo,” dijo Bob Hormats, vicepresidente de Goldman Sachs, en Nueva York.
- Para revertir estos desequilibrios, Estados Unidos está urgiendo a los funcionarios europeos y asiáticos a que implementen reformas económicas dirigidas a impulsar el gasto de los consumidores en sus economías, dijeron los economistas.
- Al mismo tiempo, las crecientes tasas de interés de Estados Unidos deberían alentar a los consumidores estadounidenses a ahorrar más y gastar menos, en tanto el presidente George W. Bush prometió recortar a la mitad el déficit presupuestario en el curso de su segundo mandato.
- El ingreso neto de capitales extranjeros durante el año pasado, por 821,820 millones de dólares, financió adecuadamente la cuenta corriente de Estados Unidos, pero fue usado en su mayor parte para financiar el consumo más que las inversiones, por lo que hizo poco para reparar los desequilibrios subyacentes, dijeron analistas de Deutsche Bank.
- El crecimiento anualizado del PIB de Estados Unidos es actualmente de 3.8 por ciento, comparado con el 1.7 por ciento registrado por Canadá, y el 2.9 por ciento anual del Reino Unido, el 1.6 por ciento de crecimiento de Alemania, y una recesión, en términos técnicos, de Japón.
- El ahorro nacional en Estados Unidos es solo de cerca de 1 por ciento del total de los ingresos. La tasa de ahorro de 1,3 por ciento registrada en los últimos tres años es la más baja en un periodo de dos años desde la Depresión, según Goldman Sachs, y está dramáticamente por debajo del promedio de cerca de nueve por ciento registrado entre 1960 y 1983, según Deutsche Bank.
- La política de incrementos graduales de las tasas de interés adoptada por la Reserva Federal alentará probablemente un cambio “modesto” en la conducta de los consumidores, según Economist Intelligence Unit, una división de la revista The Economist.
FUENTE: Agencias
Avanza el dólar
El dólar avanzó ayer sin prestar mucha atención a los comentarios menos optimistas del presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, sobre la economía de Estados Unidos, ya que el mercado se centró en cambio en un informe que se publicará el viernes y que muchos esperan muestre un sólido crecimiento del empleo.
En su testimonio ante la Comisión Presupuestaria de la Cámara de Representantes, Greenspan dijo que la economía está creciendo a un ritmo bastante bueno, pero que el país debe encarar los déficits presupuestales constriñendo el gasto.
Luego de esas declaraciones, el dólar perdió algunas de sus ganancias tempranas frente al euro, pero después volvió a subir.
Para la tarde en Nueva York, el euro había caído a 1.3125 dólares, un descenso del 0.4 por ciento en la jornada. La moneda única europea subió a alrededor de 1.3131 dólares tras los comentarios de Greenspan desde los 1.3100 dólares antes de que hablase, pero al final estaba en 1.3119 dólares.
Los operadores, sin embargo, ya estaban tomando posiciones frente al informe del empleo, con especulaciones acerca de unas cifras espectaculares. Los economistas de Wall Street esperan que los nuevos empleos de Estados Unidos totalicen 220 mil en febrero, comparado con los 146 mil del mes previo, según un sondeo.
“No es quizás el mejor momento para ser pesimista sobre el dólar dado que hay un poco de optimismo respecto a las cifras de de las nóminas”, dijo Sean Callow, estratega de moneda de IDEAglobal, en Nueva York.
