Pekín, (EFE).- La osa panda "Basi", estrella del zoo de la ciudad de Fuzhou (sureste de China) y uno de los ejemplares más longevos de su especie, celebró su 25 cumpleaños, equivalentes a los 100 en un ser humano, informó la prensa estatal.
Fruta, mucho bambú, un pastel y hasta un grabado en el que aparece la palabra "shou" (longevidad) fueron los presentes llevados a la osa, que es considerada como la "super-estrella" de los pandas por los numerosos viajes y giras que ha dado en más de dos décadas.
Aunque aquejada de alta presión arterial, enfermedades neurológicas y operada de cataratas hace tres años, Basi sigue siendo muy querida por los vecinos de Fuzhou, que la visitan a menudo.
Según la agencia oficial Xinhua, Basi es capaz de jugar al baloncesto, hacer halterofilia e incluso ir en bicicleta, y su afición por los deportes le valió ser nombrada mascota oficial de los Juegos Asiáticos celebrados en 1990 en Pekín, en cuya ceremonia de inauguración participó.
También ha hecho "visitas diplomáticas" a otros países, como las seis que hizo a diversos zoos de EU, una prueba de que China suele utilizar a sus pandas como "embajadores de la amistad" con otros países con los que desea aumentar lazos estratégicos o comerciales.
En los últimos meses, Pekín está casi obsesionada con regalar un oso panda a Taiwán.
El oso panda, que se encuentra en estado de extinción, sólo vive en estado salvaje en el centro oeste de China, sobre todo en las zonas montañosas de la provincia de Sichuan.
La reducción de los bosques de bambú en la zona, que ha causado el aislamiento de unos ejemplares de otros y con ello la endogamia, es uno de los principales factores de la baja reproductividad de este plantígrado, y con ello los temores a que en el futuro pueda desaparecer.
Actualmente hay unos mil 600 pandas en libertad y otros 160 en zoológicos de todo el mundo.