Las autoridades sospechan de que se trata de un ataque suicida, según han declarado varios testigos.
Islamabad, (EFE).- Diecinueve personas resultaron muertas y cerca de setenta heridas hoy, viernes, en un atentado contra un santuario musulmán a las afueras de Islamabad, la capital de Pakistán, confirmó a EFE el ministro de Información, el jeque Rashid Ahmed.
Según Ahmed, "19 personas han muerto y otras 67 han resultado heridas en el incidente, dos de las cuales se encuentran en estado muy grave".
El atentado tuvo lugar esta mañana cuando miles de fieles suníes y shiies recitaban el Corán en el santuario de Bari Imam Shah, situado en el pueblo de Nurpur Shah, a las afueras de Islamabad, donde hoy finalizaba un festival de cinco días de duración con motivo del aniversario de ese santo sufí del siglo XVII, patrón de la ciudad.
Ahmed indicó que no cree que el atentado esté relacionado con un enfrentamiento entre las comunidades shiita y suní, frecuentes en el país.
El presidente paquistaní, el general Pervez Musharraf, condenó hoy con dureza el atentado, y dijo estar "muy sorprendido y muy enfadado por la comisión de este acto terrorista".
Según Musharraf, el incidente demuestra que el pueblo debe unirse contra los extremistas, los terroristas y los que apoyan el fanatismo en el país, a los que acusó de impedir "el desarrollo y el progreso del país".
El santuario de Bari Imanm Shah está situado a menos de un kilómetro de la residencia del primer ministro de Pakistán, Shaukat Aziz, y cerca del enclave diplomático, donde se ubican multitud de embajadas.
El atentado causó el caos en el lugar, al que acudieron varias ambulancias además de efectivos de la Policía y los bomberos, que acordonaron la zona en la que los equipos de rescate atendían a las víctimas.
El ataque también provocó protestas por la falta de seguridad en el santuario, que han derivado en enfrentamientos entre los miles de fieles que allí se encontraban y la Policía, que cargó con palos contra la multitud.
Las autoridades sospechan de que se trata de un ataque suicida, según han declarado varios testigos, aunque no se descarta la hipótesis de que la bomba fuese detonada a distancia y, por el momento, ningún grupo ha reclamado la autoría del hecho.
