Londres, (EFE).- Las mujeres que han sufrido violación sexual en el Reino Unido podrían perder el derecho a denunciar a su atacante si en el momento de la agresión estaban ebrias, según una controvertida decisión judicial.
Un alto tribunal británico desestimó la denuncia de una estudiante que estaba bebida cuando fue violada, bajo la premisa de que si consintió la agresión estando borracha, el acto no fue contra su voluntad, informa el diario "The Times".
Esta polémica decisión coincide con la entrada en vigor de la ley que permite a los "pubs" (bares) en Inglaterra y Gales vender alcohol sin límite de horario y da la razón a aquellos sectores contrarios a la ley que argumentan que con esta medida se beberá más en el país.
El caso fue desestimado después de que la mujer admitiera que no podía recordar si había dado o no su consentimiento para mantener una relación sexual con su violador.
Según la ley sobre Ofensas Sexuales de 2003, una persona consiente la relación sexual si tiene la capacidad y la libertad para elegir.
La joven fue violada por otro estudiante, que trabajaba como encargado de seguridad en la residencia universitaria donde ella reside.
La mujer, a pesar de reconocer que tenía lagunas en su memoria de lo ocurrido esa noche, sigue defendiendo la culpabilidad de su agresor: "Si yo hubiera querido dormir con él, hubiera subido los pocos escalones que hay hacia mi habitación".