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LONDRES, INGLATERRA.- Britney Spears reveló que está totalmente desinteresada en lucir sexy de nuevo ahora que es una mujer casada, y auguró que incluso podría enfrentar problemas con su peso ya que ama la comida chatarra, informó la prensa local.
"Si quieren que use un vestido fino para ir a Starbucks están totalmente equivocados. Soy una de esas personas que después de casarse se dejó ser", dijo Spears en declaraciones al sitio electrónico Contac Music citadas por la prensa local.
La cantante, que a sus 23 años de edad espera a su primogénito que al parecer será niña, descartó que la imagen descuidada que ha adoptado en meses recientes sea pasajera y aseguró que convertida ya en esposa y madre, no le interesa regresar a su escaso vestuario.
La intérprete de Toxic señaló que su apariencia sexy fue una imagen que ella misma creó y buscó, ya que está muy lejos de ser perfecta; y en ese sentido afirmó que en esta nueva etapa de su vida, ya no le interesa en absoluto volver a aquellos tiempos.
"No me miro al espejo y digo, ?Oh, soy la chica más bella del mundo?. Me miro y veo mis imperfecciones, mis defectos y no me importa. Salgo de mi casa en piyama, sin maquillaje y no me importa, porque así me siento más cómoda", aseguró.
NOTA REL
No le importa subir de peso
La sexy rubia Britney Spears, a quien la prensa criticó por aumentar de peso tras contraer matrimonio con el bailarín Kevin Federline, de 26 años, auguró asimismo que es probable que el futuro, aún después de haber dado a luz a su bebé, siga teniendo problemas de peso.
"Creo que siempre tendré problemas con mi peso. Amo la comida chatarra y de manera ocasional la comeré sin moderación, pero normalmente lo hago con medida", apuntó la estrella que puso al mundo de cabeza al besarse en la boca con la cantante Madonna.