El Reino Unido está particularmente interesado en una reforma de la Política Agrícola Común .
Londres, (EFE).- El Reino Unido asume mañana la presidencia británica de la Unión Europea (UE) con el compromiso de reformar la Política Agrícola Común (PAC) y conseguir un acuerdo sobre el presupuesto que sea satisfactorio para los Veinticinco.
Al primer ministro británico, Tony Blair, le toca asumir las riendas del semestre comunitario en un momento crítico para la UE por los desacuerdos sobre el presupuesto y el rechazo de la Constitución europea por parte de franceses y holandeses.
Pese a todo, Blair confía en superar los obstáculos de aquí a fin de año, aunque no considera trágico si no se obtienen avances.
El Reino Unido está particularmente interesado en una reforma de la PAC para poder ceder en un asunto espinoso para la UE: el llamado "cheque británico", la devolución anual de las arcas comunitarias de la que se beneficia Londres desde 1984.
Esa devolución, que negoció con mano de hierro la ex primera ministra británica conservadora Margaret Thatcher, está estimada en tres mil millones de libras (unos cinco mil millones de euros) anuales.
Si bien Blair reconoce que ese "cheque" es una "anomalía" en la UE, no está dispuesto a renunciar a él si eso no va acompañado de una reforma de la PAC, de la que se favorece especialmente Francia.
Al Gobierno británico le parece absurdo que el 40 por ciento del presupuesto de la Unión esté destinado al sector agrícola, dado que en él sólo trabaja el 5 por ciento de la población.
La negativa de Londres a renunciar a su devolución anual impidió que los Veinticinco pudieran llegar a un acuerdo, hace dos semanas, sobre el presupuesto para el periodo 2007-2013.
El primer ministro ha dejado claro que tiene que haber una reforma en la UE, el mayor bloque comercial del mundo, para poder hacer frente a los desafíos de un mundo cada vez más globalizado.
En particular, el líder laborista quiere que la UE invierta más en educación, regeneración urbana, pequeña empresa e investigación científica, entre otros asuntos, dada la fuerte competencia de economías emergentes como la India y China.
En su mensaje de introducción en el portal electrónico de la Presidencia británica, el jefe de Gobierno señala que su semestre termina en diciembre, pero no sus "esfuerzos de conseguir una sociedad más justa y más próspera".
Para él, Europa afronta desafíos en un mundo globalizado.
"El desafío de que Europa sea más competitiva en el mercado global. El desafío de una Europa segura para su población. El desafío para Europa de ser líder en cuanto a cambio climático y medio ambiente, sobre Africa y el desarrollo", afirma Blair.
"Ninguno de esos desafíos es fácil. Ninguno puede ser resuelto de la noche a la mañana. Pero tampoco pueden ser resueltos por un país solo. Europa hará mejores progresos y más rápidos si trabaja junta", puntualiza el primer ministro.
Además, el Reino Unido está a favor de una "Europa social" que favorezca a sus ciudadanos y haga frente al desempleo, dado que en la UE hay unos veinte millones de parados.
Según fuentes oficiales, el lema que apoya el Gobierno para su semestre comunitario es el de una "Europa global".
"Europa ha pasado 15 años mirando hacia adentro, estableciendo el mercado único y respondiendo a la caída del Muro de Berlín. Ahora es el momento de mirar hacia adelante y definir los términos de la Unión Europea para el siglo XXI", según un portavoz oficial.
La Presidencia británica empezará el viernes con una visita a Londres del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y los comisarios, que se reunirán en el palacete de Lancaster House y después posarán para la tradicional foto de familia.