Hermanos del occiso y cómplices secuestran taxista que dicen está coludido con ejecución
Brenda M García | EL Siglo de Durango
Acusados de homicidio en grado de tentativa, portación de arma exclusiva del Ejército, resistencia a particulares, lesiones y asociación delictuosa se encuentran detenidos los hermanos de Pascual Román Cuevas, el ganadero acribillado el lunes 28 de marzo; ellos pretendían asesinar a Enrique de la Torre Zamora, ya que aseguran que se trataba de uno de los asesinos de su hermano.
Rafael y Miguel Ángel Román Cuevas, hermanos del occiso, así como sus cómplices Efrén Ibarra Ibarra y Arnulfo Román Valdez, la tarde de este jueves privaron de su libertad a Enrique de la Torre Zamora y pretendían ejecutarlo para vengar la muerte de su consanguíneo.
Los hechos se registraron antes de las 19:00 horas del jueves en una de las calles del fraccionamiento Fidel Velázquez, donde interceptaron a Enrique de la Torre, quien conducía un vehículo del servicio público, un ecotaxi con placas 1301 DYC del sindicato de la Alianza.
Acto seguido, lo obligaron a detener la marcha e inclusive le dispararon a la unidad motriz y, en forma violenta, lo bajaron del carro, fue subido a una camioneta Chevrolet Ram Sonora de color rojo y de modelo reciente.
Posteriormente, fue golpeado, principalmente en el rostro, lesionándolo con una navaja en el costado del lado izquierdo y su estado de salud lo reportan como delicado.
Mientras trataban de huir con su víctima para matarlo lejos de la mancha urbana, la Policía Ministerial se enteró de los hechos, por lo que cerró las salidas de la ciudad y montó un operativo para localizar a la camioneta con las características de los plagiarios.
La unidad motriz fue interceptada en las inmediaciones de los fraccionamientos San Marcos y Joyas del Valle, logrando así la captura de estas personas que trataban de hacer justicia por su propia mano.
En su detención, les decomisaron tres armas de fuego, una calibre .45, otra .38 Súper y una nueve milímetros, todas abastecidas.
En su declaración, los hermanos Román Cuevas aseguraron que Enrique de la Torre tuvo participación en la muerte de Pascual: ?si a mi hermano le metieron de diez a 20 (balazos), yo les meto el doble?, exclamó uno de los familiares.
Agregaron que no confiaban en la impartición de justicia, ya que hubo resistencia para proporcionar los datos por parte de la Procuraduría del Estado, ya que desde el asesinato se les ha negado toda la información relativa a este caso en concreto, argumentando la secrecía de la investigación.
Esta declaración la resaltó el procurador de Justicia del Estado, José Luis Carrillo Rodríguez, quien comentó que el deseo de estas personas era la venganza, por lo que cualquier dato les obstaculizaría sus planes.
?No vamos a permitir las justicias por propia mano, para eso están las instancias de gobierno, para llevar la procuración de la justicia, y se les advirtió que si procedían en los términos que ellos lo estaban haciendo, obligatoriamente se iba a proceder?, expresó.
Carrillo Rodríguez informó que se tienen huellas y pesquisas del asesinato de Pascual, por lo que ahora investigarán si el herido tiene que ver en la participación del homicidio; por el momento se está a la espera de su recuperación, para que pueda rendir su declaración.
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José Luis Carrillo Rodríguez, procurador de Justicia del Estado, comentó que uno de los motivos por los cuales el defraudador de empleos a la Unión Americana escapó es porque vio la presencia de otra institución, que se presume que sea Gobernación, dato que está por confirmar.
La Dirección de Averiguación Previas informó que de las 300 personas afectadas ha captado 35 denuncias en contra de Jaime Armando Betencer, según lo indicó la titular de esta instancia, Ruth Medina Alemán.
El Procurador de Justicia exhortó a que las personas afectadas presenten su denuncia, para agilizar la captura de ese defraudador.
