Londres, (EFE).- En sus primeros cien días como Duquesa de Cornualles, Camilla Parker Bowles parece haberse ganado el respeto de la reina Isabel II, que aprecia su "papel de apoyo" al príncipe Carlos.
En este tiempo, la nueva esposa del heredero británico ha aparecido treinta veces en público -incluida una en solitario en un hospital de Cardiff (Gales)- y ha transformado por completo su imagen, comenta el diario "Evening Standard".
Según este periódico, "su dedicación por el trabajo de representación de la familia real ha ayudado en gran medida a mejorar sus relaciones con la Reina".
El apoyo de Camilla, que cumplió 58 años, también ha contribuido a mejorar la imagen del príncipe Carlos, quien "está mucho más relajado", y juntos "hacen un buen equipo", aseguró un ayudante del heredero.
La duquesa de Cornualles recibió por su cumpleaños un escudo de armas, que combina los animales heráldicos de su esposo, el león, y de su padre, un jabalí.
La prueba más difícil para la Duquesa llegará cuando viaje a Estados Unidos en noviembre en compañía de su marido.
Los estadounidenses adoraban a Lady Di, pero Camilla asegura no sentirse intimidada por las posibles comparaciones, y entiende que su papel es el de "apoyar al hombre al que ama, tanto en público como en privado", aseguraron fuentes cercanas a la pareja.
La duquesa está decidida a que su debut internacional sea un éxito, asegura el "Evening Standard".
El matrimonio será recibido en Los Angeles, al inicio de su gira por Estados Unidos, con una fiesta de millonarios y estrellas de cine.
En Washington, la pareja se encontrará con el presidente George W. Bush y su esposa, Laura.
