Todo está listo: en el municipio de Torreón abrirán hoy 360 mesas receptoras para que los militantes y simpatizantes del PRI emitan su sufragio y decidan a quién de los cuatro precandidatos que lograron su registro, Humberto Moreira Valdés, Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, Heriberto Ramos Salas y Javier Guerrero García, consideran el más apto, serio y honorable para enarbolar la lucha tricolor por la conquista de la gubernatura. Están dispuestas 160 mil boletas para igual número de votantes, cantidad que constituye el 40 por ciento del padrón electoral.
En las actuales condiciones políticas, la elección interna en el PRI reviste especial importancia, ya que según todos los instrumentos de medición sobre conocimiento, simpatía, posicionamiento e intención del voto, el tricolor disfruta de una amplia ventaja sobre otras ofertas político-partidistas; hay quién incluso anticipa que el personaje que resulte triunfador hoy, muy probablemente se imponga en la elección constitucional. Sin demeritar el esfuerzo panista y concediendo una posibilidad real de que en la campaña, quien resulte el abanderado blanquiazul logre abatir la actual desventaja, la jornada de hoy podría resultar decisiva para el futuro de la entidad.
Se impone entonces un análisis serio sobre las opciones que se presentan hoy en la boleta tricolor. No se trata de un juego de popularidad o ponderar la mejor sonrisa: se trata de ubicar al que, de los cuatro, tenga las mejores herramientas para sacar adelante la encomienda, ya que se le encargará -eventualmente- la máxima responsabilidad en el Estado, la de conducir los esfuerzos de todos los coahuilenses hacia derroteros de mayor progreso y bienestar. No es cualquier cosa y eso lo debemos entender todos. La moneda está en el aire. El ex gobernador Eliseo Mendoza Berrueto, presidente de la Comisión Estatal para el Desarrollo del Proceso Interno, dice que hoy mismo se conocerá el nombre de quien resulte el abanderado priista. Reconoce que pudiera presentarse algún contratiempo, “uno nunca sabe, de repente se soliviantan los ánimos en alguna casilla, pero esperemos que no, esperemos que haya buena actitud y madurez para poder superar este reto”.
Esperemos.