La elección de José Ángel Pérez Hernández como abanderado del Partido Acción Nacional a la Presidencia Municipal de Torreón, fue una sorpresa para quienes esperaban que la nominación de Jorge Zermeño como candidato a la gubernatura de Coahuila, marcaría línea a favor de Jesús de León Tello.
La alianza entre Juan Antonio García Villa y José Ángel por una parte y de Jorge Zermeño y Jesús de León por otra, no tuvo ni el estilo ni la fuerza de imposición o de consigna, en función de los resultados cruzados obtenidos.
Tampoco la preferencia del alcalde Guillermo Anaya a favor de Jesús de León definió el resultado, con lo que se advierte que los militantes del PAN distinguen que una cosa es el partido al que pertenecen y otra los gobiernos que de dicho partido emanan, lo que les ofrece espacio para elegir libremente al momento de seleccionar candidatos para relevar al Gobierno de que se trate.
Los enlaces referidos resultan singulares, porque José Ángel fue integrante del primer círculo de Jorge Zermeño y en cambio, tanto Jesús de León como el primer regidor y el síndico de su planilla, en su origen fueron parte del Grupo Panda, entidad de vínculo entre el PAN y la sociedad, creado por García Villa.
Lo anterior explica que sin denuesto de sus liderazgos tradicionales, el PAN ofrece espacios de desarrollo a figuras emergentes y abre oportunidad al militante que aspire a una candidatura, que esté dispuesto a hacer escoleta y a cultivar la virtud de la paciencia. Tanto Jorge Zermeño como José Ángel Pérez son candidatos a gobernador y alcalde después de un primer intento fallido, lo que indica que la derrota de Jesús de León es una pausa en su carrera, que le brinda ocasión para crecer en la momentánea adversidad.
Otros resultados dignos de estudio ofrecen las candidaturas a diputados en los cinco distritos con cabecera en Torreón, cuatro de los cuales quedan en manos de personajes que por aparte de su preferencia frente a los precandidatos a gobernador y alcalde, proceden del Gobierno de Anaya. Tales son los casos de los ex regidores José Máynez y Jacinto Pacheco, así como Luis Gurza y José Luis Mendoza, quienes fueron funcionarios en Planeación y Desarrollo Humano en la actual administración.
Para el PAN no todo es miel sobre hojuelas, existen heridas por curar en virtud del encono a que llegó la contienda, a raíz de los señalamientos de José Ángel sobre el presunto apoyo con recursos públicos de parte del alcalde Guillermo Anaya a favor de Jesús de León, lo que sin duda cargarán como pasivo a la cuenta del PAN y del propio Pérez Hernández los adversarios políticos de ambos.
Por otra parte, el Partido Revolucionario Institucional eligió candidatos a diputados mediante consulta ciudadana, lo que favorece a su posicionamiento. Sin embargo este sistema acusa debilidad de origen por haberse llevado con un padrón abierto, lo que es igual a que no se hubiera utilizado padrón alguno y lo asemeja con las elecciones públicas en el antiguo régimen, en las que el PRI decía la primera y la última palabra.
Con dispensa de trámite al interior de su partido, llega al proceso constitucional Eduardo Olmos Castro como abanderado del PRI en el Municipio de Torreón, al que se presenta con bombo y platillo como “candidato de unidad”, cuando es producto de un vulgar ‘dedazo’ desde Saltillo.
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