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MÉXICO, DF.- En una industria controlada por hombres, Carla Estrada, siendo una joven universitaria llegó a la producción de televisión. Con ideas nuevas, que con el tiempo la convirtieron en La Reina Midas de las telenovelas, ahora tiene un nuevo reto: superar con Alborada el éxito internacional que cosechó con Amor Real.
Con más de 20 años de carrera, la productora recuerda los buenos momentos, pero también los negativos, como cuando fue víctima de machismo justo en sus inicios.
?No era común que una mujer fuera productora; físicamente me agredieron una sola vez, con el cable de una cámara; me dejaron la pierna morada. Moralmente, fui víctima de situaciones muy complejas, intentaban hacerme la vida de cuadritos?, indica. Años después, cuando Carla Estrada grababa la telenovela Alondra, el mismo hombre que le provocó el moretón con el cable se acercó a ella.
?Me ofreció una disculpa. Aceptó que me hizo daño, pero a la par confesó que se sentía orgulloso de mis logros. Me sentí bien que ese rencor desapareciera?, agrega.
En octubre regresa a la pantalla con Alborada, que protagonizan Lucero y Fernando Colunga. Estrada sabe que la tarea no será nada fácil y aunque algunos la consideran La Reina Midas de las telenovelas, ella no se confía y asegura que ?va con todo? para superar a Amor Real.
Estrada comenta que a diferencia de hace muchos años, cuando sus elencos eran conformados por artistas que se arriesgaban con ella en los proyectos, ahora se siente privilegiada de que sean los mismos histriones quienes la busquen para trabajar.
?Me acuerdo que en Pobre Juventud (una de las primeras telenovelas juveniles) actuaron los que quisieron arriesgar; hoy, los actores me buscan pero obviamente escoges a quien se entregue, sea creativo y responsable?, afirma.
Sus inicios
Pero entre todo este triunfo, Carla Estrada recuerda sus inicios en la producción cuando, a los 22 años, una joven estudiante de la carrera de comunicación en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco, ingresó a Televisa.
?Mi mamá es actriz, mi papá periodista, así que de alguna forma nací y crecí dentro de este medio; siendo estudiante comencé a trabajar, y a través de un ex novio conocí a Víctor Hugo O?Farril, vicepresidente de Televisa San Ángel?.
A principios de los 80, Estrada fue productora asociada de Valentín Pimstein en la telenovela Vanessa.?Fue todo un reto para mí; dirigir a Lucía Méndez, Héctor Bonilla y Rogelio Guerra. Mi equipo de producción éramos dos; yo hacía la comida en mi casa y ahí alimentábamos a cuatro técnicos; no había la estructura de ahora. En ese entonces entró Salvador Mejía como mi asistente?, recuerda.
