A 130 kilómetros por hora disminuyeron los vientos del huracán ?Dennis?.
Derriba el fenómeno instalaciones eléctricas, algunos tejados, señales de tráfico y árboles.
EFE
PENSACOLA, FLORIDA.- El presidente de Estados Unidos (EU), George W. Bush, declaró ?zona de desastre? a las regiones de Florida, Mississippi y Alabama afectadas hasta ahora por el huracán ?Dennis?, que tocó tierra ayer con vientos de casi 200 kilómetros por hora.
Esta declaración pone a disposición de las autoridades fondos extra para hacer frente a los daños causados por el ciclón y ayudar a las víctimas.
?No queremos que se preocupen por el presupuesto?, dijo Michael Brown, director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).
Brown dijo que se desconoce aún si ha causado víctimas y la magnitud de los daños materiales producidos por el huracán, que entró en el continente en una zona que fue azotada en septiembre por el ciclón Iván.
El ojo del ciclón se encontraba a las 23:00 Tiempo del Meridiano de Greenwich (GMT, por sus siglas en inglés), en el suroeste de Alabama y arreciaba vientos de 130 kilómetros por hora, lo que hacía de él un huracán de categoría uno, en una escala de cinco, según el último informe del Centro Nacional de Huracanes (CNH). ?Dennis? se desplaza en dirección norte a más de 30 kilómetros por hora y se prevé que subirá por el valle del río Ohio.
De acuerdo al CNH, ?Dennis?, antes de convertirse en una simple tormenta el próximo miércoles en el centro de EU, dejará copiosas lluvias que pueden causar inundaciones en los estados de Mississippi, Alabama, Tennesse, Arkansas, Kentucky, Missouri, Illinois e Indiana.
En el Golfo de México las ráfagas habían sido de 234 kilómetros por hora (categoría cuatro), pero cuando alcanzó tierra al este de Pensacola (Florida) se habían moderado a menos de 200 kilómetros por hora (categoría tres).
Las autoridades han advertido de que sus vientos pueden generar tornados en Alabama, Georgia y Florida.
El ciclón ha derribado instalaciones eléctricas, algunos tejados, señales de tráfico y árboles. Además, las autoridades prevén inundaciones en la región por la gran cantidad de agua que está descargando.
El senador republicano de Alabama Jeff Sessions afirmó en una entrevista que el estado sufrirá ?un golpe económico? por el cierre de negocios y playas, así como por la pérdida de árboles y algunas cosechas.
El Centro Nacional de Huracanes pronostica que el huracán continuará debilitándose, el cual pasó a ser clasificado como una tormenta tropical anoche.
Mientras, su ojo continúa su trayectoria noroeste a una velocidad de unos 34 kilómetros por hora, que le llevará de Alabama a Mississippi y el lunes a Tennesse.
Respetó patrimonio histórico cubano
El huracán ?Dennis? provocó graves daños en la zona costera de Trinidad, en el centro de Cuba, pero respetó el casco histórico de la ciudad, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
Casi dos días después del paso de ?Dennis? por la región central de la isla, cientos de miles de cubanos continúan todavía evacuados y las autoridades estiman que el huracán ha causado cuantiosos daños materiales y ha dejado, al menos, una decena de víctimas mortales.
Decenas de miles de viviendas han sufrido derrumbes totales o parciales, parte del país sigue aún sin luz y sin agua y hay problemas en las comunicaciones telefónicas en algunas ciudades.
La agricultura, especialmente los cítricos y los platanales, han sido también castigados con dureza.
?Dennis?, que entró en Cuba por Cienfuegos (centro-sur), afectó gravemente a las costas de la vecina Trinidad, pero respetó el centro histórico de la ciudad, uno de los principales puntos de atracción turística del país.
Más de dos mil 300 viviendas fueron afectadas en la provincia, según medios locales, aunque los edificios del centro histórico de Trinidad -fundado en 1514 y de una gran riqueza arquitectónica- sufrieron daños parciales, principalmente en los tejados y cubiertas.
En la ciudad, de 53 mil habitantes, los vecinos se apresuraban ayer a limpiar las vía públicas, recoger escombros, retirar los árboles caídos y los postes y cables del tendido eléctrico destrozados.
Autoridades locales apuntaron que Trinidad todavía tardará varias semanas en recuperar el suministro eléctrico con normalidad.