Responsabiliza el mandatario de Venezuela al G8 del "nuevo desorden internacional imperante".
Caracas, (EFE).- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, reeditó hoy contra el imperialismo el juramento que hace 200 años hizo el prócer independentista Simón Bolívar de no descansar hasta liberar su tierra del dominio colonial.
En el acto oficial de conmemoración del segundo centenario del llamado "Juramento de Montesacro", hecho por Bolívar el 15 de agosto de 1805 en lo que ahora es un parque de Roma, Chávez estimó que en 25 años se podrá evaluar si cumplió el juramento que él reeditó hoy.
"En el 2030, si Dios quiere (...) y si hacemos lo que tenemos que hacer, estaríamos en condiciones de venir aquí a decirle al mundo, junto con Fidel (Castro, presidente de Cuba), que estamos absueltos por la historia", dijo ante el sarcófago del Libertador Bolívar.
A diferencia de Bolívar, Chávez, en un largo discurso, afirmó que "nuestra suprema tarea de hoy es mucho más grande y comprometida", porque "se trata, nada más y nada menos, de impedir que el imperialismo acabe con el planeta, que hoy se cae a pedazos".
"Sólo se puede salvar al mundo -prosiguió- con la conciencia de los pueblos, que es la otra superpotencia", y si el imperialismo es superado por "un socialismo del siglo XXI pluripolar", que deje atrás "el mundo unipolar o bipolar".
"La opinión pública mundial está en formación y puede ser la tranca, el freno, la criptonita de Supermán", dijo Chávez, y exclamó que "¡somos millones, somos la mayoría y no podemos permitir que una minoría ciega destruya al planeta!"
Tras trazar un apocalíptico escenario social, ambiental, político y económico mundial, de lo que culpó al "desenfreno del destructivo modelo capitalista", Chávez vio en las manifestaciones de protesta a las cumbres de gobernantes de las potencias algunos destellos de lo que llamó "el despertar de los pueblos".
"No hay reunión del G-8, por ejemplo, donde no se les venga encima la otra superpotencia" y por ello deben reunirse "escondidos en portaaviones y submarinos. ¡Le tienen miedo a los pueblos!", afirmó.
Chávez los responsabilizó de lo que denominó "el nuevo desorden internacional imperante" y reiteró que "el dilema al que estamos enfrentados es hegemonía o supervivencia y no sólo socialismo o barbarie".
"El asunto es más grave, porque la amenaza es de extinción de la especie humana", y es lo que "el imperialismo norteamericano pretende imponerle al mundo, a punta de invasiones, bombas, chantajes, consumismo y terror, con su concepción irracional", dijo.
Parafraseando al guerrillero argentino-cubano Ernesto "Che" Guevara, Chávez subrayó que "los revolucionarios somos el escalón más alto de la especie humana" y "yo sí creo que vamos a salvar al mundo".