José Luis Lagunas López será el nuevo encargado de reactivar la Coordinación de Penales Federales.
MÉXICO, D.F., (SUN-AEE).- Carlos Tornero Díaz dejó de ser el responsable de controlar las seis prisiones federales que hay en México y enfrentará una investigación de la Procuraduría General de la República (PGR) por los hechos de corrupción y desorden registrados en La Palma desde hace tres años.
Su cargo es ocupado desde hoy por José Luis Lagunas López, quien llegó a la institución hace tres semanas junto con Miguel Ángel Yunes Linares, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal.
Lagunas López reactivará la Coordinación de Penales Federales, cargo que durante los casi tres años de gestión de Tornero Díaz estuvo acéfalo.
A ese sitio llegará Mario Balderas Alvarez, quien ha acompañado a Yunes Linares en los últimos días en los operativos de La Palma, estado de México, Matamoros, Tamaulipas, y Puente Grande, Jalisco. Asimismo, la SPP dará a conocer hoy los cambios en la dirección de los tres penales de máxima seguridad.
Se espera que el anuncio de estos movimientos sea hecho por el secretario de Seguridad, Ramón Martín Huerta. Uno de los movimientos sería el de la actual directora de La Palma, María Josefina Jaimes Quirós, quien fue designada hace
apenas un mes en sustitución de Guillermo Montoya Salazar, arraigado por la PGR junto con otros cinco ex funcionarios por su presunta responsabilidad en la permisividad de los actos de corrupción de dicho centro penitenciario.
Tornero Díaz, quien ha declarado dos veces ante la PGR, también será investigado por la Secretaría de la Función Pública (SFP) que indagará posibles omisiones llevadas a cabo como servidor público.
En los últimos días surgieron en la prensa nacional documentos y testimonios sobre reuniones de capos como Osiel Cárdenas Guillén, Benjamín Arellano Félix, Francisco Arellano, Rafael Caro Quintero y Albino Quintero Meraz llevadas acabo en La Palma, y de las cuales tuvo conocimiento Tornero Díaz.
Las reuniones habrían sido aprobadas y encabezadas por Guillermo Montoya para negociar con los capos la finalización de una huelga de hambre en protesta por condiciones carcelarias indebidas.
Hace una semana, Yunes Linares reveló en conferencia de prensa parte de las condiciones en que vivían algunos internos encabezados por Osiel Cárdenas y Benjamín Arellano. Una de las primeras irregularidades señaladas por el funcionario era que los dos líderes del narcotráfico ocupaban celdas contiguas lo cual está prohibido por el reglamento del penal.
Además, ambos gozaban de visitas de abogados, familiares y amigos que duraban entre 9 y 12 horas diarias, así como facilidad para comunicarse al exterior toda vez que los encargados de controlar el sistema de bloqueo de teléfonos celulares en La Palma lo desconectaban en determinados momentos del día.