SEBRING, FLO.- El alto mando de la Champ Car, propiedad de Open Whell Racing, no quiere dejar su futuro en manos del azar y por ello decidió echar toda la carne al asador para promocionar su presentación en Sebring, de cara al inicio de campaña en Long Beach, en abril próximo.
La categoría de autos fórmula puso especial énfasis en el mercado mexicano, junto con el canadiense y el estadounidense, que en semanas anteriores estuvo saturado con información de la Nascar Bush en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Así que la Champ Car decidió no escatimar. Invitó a un selecto grupo de periodistas mexicanos, a quienes dio trato de primera al trasladarlos en el avión particular de Kevin Kalkhoven, copropietario de la serie.
No sólo fue el viaje en el mismo avión con Dick Eidswick, presidente de la categoría, sino que el campeón, Sebastien Bourdais, fue el encargado de dar la bienvenida oficial a la prensa mexicana.
El francés del Newman-Haas, que no salió a la pista este miércoles debido al mal clima, se mostró optimista respecto a la temporada 2005, la cual presentará nuevos pilotos, además del regreso del brasileño Cristiano da Matta, monarca en 2002.
"La serie va a estar muy bien, nosotros tenemos una gran base del año pasado y podemos tener un buen año", apuntó.
Sostuvo que todos los rivales serán de respeto, "nada está asegurado en las carreras", y más ahora con la nueva reglamentación que buscará aumentar la competitividad.
"Sabemos lo que tenemos que hacer, tengo confianza para el inicio de temporada, aunque aún estamos lejos de quedar listos. Tenemos que seguir trabajando", aseguró Bourdais.
El "Florida Fling" llegará a su fin este jueves, cuando 16 pilotos entrenen en la pista de Sebring, además de ofrecer entrevistas y sesiones fotográficas para la prensa.
