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NUEVA YORK, EU.- La Policía neoyorquina cerró de forma parcial la estación de trenes conocida como Penn Station, en el centro de Nueva York, ante la existencia de un paquete sospechoso.
Las autoridades desplegaron un amplio operativo policial por la red de transporte público de la ciudad, después que ayer se desvelara la existencia de una amenaza “creíble” de atentado en el metro de la ciudad.
Una botella en cuyo interior se apreciaba un líquido verdoso, se encontraba cerca de las taquillas de la estación y fue inspeccionado por agentes equipados con indumentaria contra agentes químicos y bacteriológicos.
Una de las entradas principales de la estación fue cerrada, en tanto que la Policía local y agentes especiales, algunos de ellos con perros policía, sellaron la zona afectada.
La estación de Penn Station registra cada día una gran afluencia de gente, pues de ella parten los trenes de la compañía Amtrak, que opera entre Washington y Boston, así como los trenes que enlazan con Nueva Jersey y los que conectan con Long Island.
En total, se calcula que cerca de medio millón de personas usa cada día esta estación, por la que pasan además varias líneas de Metro de la ciudad.
La estación fue reabierta más de una hora después luego que la Policía de Nueva York señalara que el líquido verdoso no suponía ningún peligro ya que se trataba de una sustancia para limpiar cañerías.
El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, informó ayer de la existencia de una amenaza sobre el principal sistema de transporte de Nueva York, el Metro, que tiene 460 estaciones y desplaza cada día a casi cinco millones de personas.
Desde ayer se han reforzado las medidas de seguridad, con un mayor despliegue de agentes en los trenes y estaciones y más puntos de control de bolsas y paquetes, que comenzaron.