Inicia la etapa de plenario, en la que los procesados pueden hacer sus descargos y el juez prepara la acusación formal contra ellos.
Santiago de Chile, (EFE).- El juez chileno Juan Guzmán cerró hoy, después de siete años, la etapa de investigación del caso "Caravana de la Muerte", en el que procesó al ex dictador Augusto Pinochet en el 2000, informaron fuentes judiciales.
Según la resolución del juez, el caso tiene 21 procesados por un total de 94 prisioneros políticos, de los que 19 figuran en las listas de detenidos desaparecidos.
La "Caravana de la Muerte" fue una comitiva militar cuyos integrantes recorrieron entre octubre y noviembre de 1973 varias localidades de Chile, en las que sus integrantes ejecutaron sin juicio a decenas de prisioneros políticos.
El 1 de diciembre de 2000, después que en agosto de ese año la Corte Suprema despojara a Pinochet de su fuero, el juez Guzmán procesó al ex dictador (1973-1990) como autor de 57 homicidios calificados y 18 secuestros (desapariciones) en ese proceso.
Comenzó entonces una dura batalla judicial, que incluyó el arresto domiciliario de Pinochet en su finca de Los Boldos, el 29 de enero de 2001 (el 14 de marzo obtuvo la libertad bajo fianza).
Las cortes superiores modificaron posteriormente la tipificación de los delitos, rebajándola desde autor a encubridor y la defensa del ex gobernante logró, primero evitar la filiación del procesado (confección del prontuario), y después su exoneración por motivos de salud.
La Corte de Apelaciones primero y la Suprema después aceptaron unos informes médicos según los cuales Pinochet padecía una demencia subcortical progresiva e irreversible que lo incapacitaba para afrontar un juicio.
Tras el cierre de la etapa de sumario, el juicio, que se lleva según el antiguo procedimiento penal chileno, entra a la etapa de plenario, en la que los procesados pueden hacer sus descargos y el juez prepara la acusación formal contra ellos, antes de dictar la sentencia de primera instancia.
Encabeza la lista de procesados en el caso el general retirado Sergio Arellano Stark, que fue el jefe de la comitiva en calidad de "delegado" del comandante en jefe del Ejército (Pinochet), como autor de homicidios calificados.
Por iguales cargos están enjuiciados el ex brigadier Pedro Espinoza y los ex coroneles Sergio Arredondo y Marcelo Moren Brito, además del ex mayor Armando Fernández Larios, que vive en EU, como testigo protegido tras cumplir una condena por el asesinato del ex canciller Orlando Letelier.
También figuran entre los procesados los ex coroneles Carlos López Tapia, que es primo del juez Guzmán, Gabriel del Río, Mario Cazenave y el general retirado Adrián Ortiz.
Otro ex general que estaba enjuiciado, Héctor Bravo Muñoz, falleció hace algún tiempo.
Los demás encausados son ex oficiales de menor graduación y suboficiales, que se desempeñaban como pilotos o mecánicos de helicópteros y un abogado, David Rojas, que actuaba como fiscal de la justicia militar.
La "Caravana de la Muerte", según el expediente, ejecutó presos políticos en las localidades de Cauquenes (4), Linares (4) y Valdivia (12), en el sur del país, y en las norteñas ciudades de Antofagasta (14), Calama (26), Copiapó (16) y La Serena (15).
Los detalles de los asesinatos masivos se hicieron públicos en los años 80 a través del libro "Los Zarpazos del Puma", de la periodista Patricia Verdugo, que en esa época, cuando aún Pinochet gobernaba en Chile, debió circular de forma clandestina.
