EL ORO, DGO.- Los ciudadanos de esta localidad recibieron con agrado el anuncio de la separación de sus cargos de la Policía Municipal de Jaime Agustín Martínez Regis y Armando Rosales Núñez, comandante y subcomandante, respectivamente.
Un grupo de habitantes del municipio hizo llegar una carta a los miembros del Cabildo donde manifestaron su molestia ante la actitud de los miembros de la Policía Preventiva.
Sin embargo, comentaron que a dichos sujetos que proceden de la Policía Ministerial todavía se les ve prepotentes y desafiantes a bordo de las patrullas de la Policía Municipal, por lo que seguirán insistiendo en que se haga caso a sus peticiones.
Ernesto Chaparro, Francisco Corral Torres, Ángel Ávila Acosta, Silvia Vargas y Jesús Rentería, entre otros ciudadanos de El Oro, comentaron acerca de la necesidad de que los miembros del Cabildo, en su calidad de autoridades de elección popular, deben hacer respetar sus decisiones sobre cualquier tipo de encubrimiento que se pudiera dar por parte del Alcalde a estos elementos de la Policía Municipal.
Comentaron los ciudadanos que no se debe defender a estos elementos que acaban con la armonía y convivencia pacífica de los habitantes del municipio de El Oro, recordando los atracos y fechorías que han cometido durante el tiempo que han trabajado en la dependencia municipal.
Los ciudadanos no sólo piden, sino que exigen que los miembros del Cabildo hagan valer las peticiones de la sociedad, ya que la labor de los servidores públicos, incluyendo al Alcalde, es velar por el bienestar de la comunidad, situación que ha sido contraria.
Facultad del Cabildo
Respecto de las quejas de los regidores de El Oro en cuanto a que el alcalde Miguel Carrete Saenz da por terminadas las sesiones de Cabildo argumentando que tiene otros asuntos qué arreglar, invitándolos a abandonar el lugar, Benigno Barraza Ojeda, secretario general del Comité Municipal del Partido de la Revolución Democrática, señaló que los artículos 31, 34, y 69 de la Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de Durango establecen la facultad de regidores y síndico de poder sesionar fuera del edificio del Ayuntamiento.
Incluso, contempla que se puede votar el acuerdo de Cabildo de la sesión anterior y la atribución de suspender o destituir al secretario del Ayuntamiento, en el caso de que no quisiera quedarse hasta la conclusión de la junta del órgano colegiado.