EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- El dueño del avión tripulado por los pilotos del Distrito Federal que desaparecieron en Lerdo, será citado a declarar en virtud de que tiene mucho por aportar en las investigaciones, informa Raúl Ramírez Escobar, agente investigador del Ministerio Público encargado del caso.
A casi dos meses de la desaparición de los pilotos, las autoridades no han logrado avances significativos y de hecho las investigaciones se han empantanado, de acuerdo a los resultados obtenidos hasta el momento.
Como se informó en su oportunidad, la desaparición de los pilotos Gerardo Rivera y Rogelio Puig Escalera, ocurrió el pasado domingo 31 de julio luego que el avión en que llegaron procedentes del Estado de México aterrizara en el aeropuerto de Lerdo, en donde viajaban otras tres personas, una de ellas de nombre Arturo Vidal, jefe de Puig Escalera y Alfredo, alias ?El Arqui?.
José Luis Puig, de 54 años de edad, con domicilio en el Distrito Federal y padre de Rogelio, interpuso la denuncia luego de esperar unos días la llegada de su hijo o cuando menos que se comunicara, pero al no tener noticias acudió a la Región Lagunera, donde él mismo realizó algunas investigaciones, que aportó a las autoridades y de hecho son los únicos avances que se tienen.
El denunciante señaló que la noche del domingo 31 de julio, su hijo le envió un mensaje para decirle que todo estaba bien y al día siguiente volaría a Torreón a cargar gasolina y después regresaba a su hogar.
En el hotel ubicado sobre la calzada J. Agustín Castro y Miguel Alemán, le informaron que Rogelio, junto con una persona identificada como Gerardo Rivera, se registraron a las 20:56 horas, del mismo domingo, en la habitación 424, pero que a las tres horas salieron y no volvieron ya.
La bitácora de vuelo indica que la tripulación llegó a Ciudad Lerdo en una aeronave Turbocomander 681, matrícula EB AVR, propiedad de Tomás Cavazos, jefe del piloto Gerardo Rivera.
Junto con la tripulación iba Arturo Vidal y dos pasajeros identificados como Alfredo ?El Arqui? y otro joven. Una Suburban, modelo reciente, color blanco con franjas, recogió a los pasajeros.
La avioneta no fue alojada en un hangar, ya que el piloto aseguró al encargado que a la mañana siguiente emprendería el vuelo. La nave permaneció en el lugar hasta el cinco de agosto, cuando un piloto identificado como De Buok, apareció con las llaves y voló a Ramos Arizpe, Coahuila, donde fue asegurada por el Ejército Mexicano por estar involucrada en otro caso.
Oficio
Raúl Ramírez Escobar, agente del Ministerio Público encargado del caso, explica que se giró oficio de colaboración a la Procuraduría de Justicia de Nuevo León, para que declare al propietario del avión, Tomás Cavazos.
Con la declaración de Tomás Cavazos, dice el agente del Ministerio Público, se espera reunir una mayor información que permita dar con el paradero de los pilotos todavía desaparecidos.
?El padre de uno de los pilotos tiene información que consideramos clave, pero no ha querido venir a declarar y eso entorpece las investigaciones?, añade Ramírez Escobar.