Clinton aceptó el nombramiento, mismo que asumirá a principios de marzo.
Naciones Unidas, (EFE).- El ex presidente de EU Bill Clinton ha aceptado el cargo de enviado especial de la ONU para coordinar las tareas de reconstrucción por el sismo en el Sudeste asiático, anunció hoy el organismo internacional.
El portavoz de la ONU, Fred Eckhard, indicó en un comunicado que el secretario general, Kofi Annan, "está seguro de que el ex presidente Clinton aportará energía y dinamismo, y se centrará en la labor de mantener un interés a nivel mundial en la fase de recuperación y reconstrucción después del desastre provocado por el seísmo".
Asimismo, agregó, que Annan considera que "no existe ninguna persona más cualificada" para ocupar este cargo que Clinton.
Sin embargo, anotó que el anuncio oficial se realizará cuando Clinton concluya su viaje por la región afectada por el seísmo, que realizará a finales de este mes junto con el ex presidente George W.H. Bush.
Por su parte, Clinton emitió un comunicado de aceptación del nombramiento, en el que dice que asumirá su nuevo cargo a principios de marzo, una vez regrese de su gira asiática.
"Estoy deseando servir como enviado especial del secretario general de la ONU para los países afectados por el tsunami (ola gigante) a principios del próximo mes y tendré más que decir cuando se produzca el anuncio oficial", declaró.
Mientras tanto, prosiguió, "continúo centrándome en mi trabajo con el ex presidente Bush para instar a la gente a que contribuya para esta causa, y ambos esperamos visitar la región juntos a finales de mes".
Clinton, junto con el ex presidente Bush, lleva actualmente a cabo una campaña de recaudación de dinero dentro de EEUU para las víctimas del seísmo del pasado 26 de diciembre, que causó la muerte de casi 300.000 personas.
Asimismo, a través de su fundación privada, Clinton coopera con el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) en una iniciativa para obtener 45 millones de dólares para ofrecer agua potable y saneamiento a los damnificados por la catástrofe.
El portavoz de la ONU indicó que, a parte de impulsar la reconstrucción de los países afectados, otra misión del enviado especial será de carácter político, como mediador en los conflictos entre el gobierno y los rebeldes separatistas en países como Sri Lanka e Indonesia.
"Este papel deberá ser aceptado primero por las partes. El secretario general quiere que el enviado especial facilite las negociaciones de paz en ambos casos", puntualizó Eckhard.
Annan visitó la zona damnificada por el terremoto y posterior maremoto a principios de enero, y quedó impactado por el alcance de la destrucción.
Fue en este viaje que anunció que nombraría un enviado especial de la ONU a la región para promover las tareas de reconstrucción a largo plazo y para que los países donantes sigan asistiendo financieramente a los gobiernos afectados.
La respuesta internacional al maremoto que afectó al sur de Asia y algunos países de Africa ha sido "sin precedentes", pero Annan siempre ha insistido que el compromiso mundial debe ir más allá de la ayuda de emergencia.
