CAMBIO DE CARA.
Cuatro equipos mexicanos vieron acción internacional a media semana y en todos ellos operó un cambio importante, aunque no en todos los casos haya sido para bien.
Los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León venían de masacrar literalmente al Toluca en el torneo local y recibían al Banfield de Argentina en el ?Volcán?; sin embargo parece que los felinos no esperaban un rival tan complicado, canchero y sabedor de que las pocas oportunidades que se presentan cuando se tiene la calidad de visitante hay que aprovecharlas, y en ese orden de ideas, no pudo derrotar al cuadro sudamericano. Un empate con sabor amargo fue lo que arrojó el cotejo.
Dentro del torneo de campeones de la Concacaf, evento de nivel abajo de mediocre, dos clubes nacionales buscan la supremacía: Pumas y Monterrey.
En este contexto también se presentó un notable cambio pues ambos cuadros no han presentado un equilibrio en su accionar dentro del campeonato mexicano pero lograron seguir adelante en la justa que busca al representante para el Mundial de Clubes.
Los bicampeones recibieron dos visitas al mismo tiempo, al Olimpia de Honduras, con quien habían empatado en el juego de ida, y a la Procuraduría Federal de Consumidor por pretender condicionar la venta de entradas al partido que Pumas sostendrá contra América a la adquisición del boleto para el juego ante el campeón hondureño.
Ambos compromisos los logró solventar; con la autoridad, reconociendo el error y dando marcha atrás en una medida que si bien es ilegal, es práctica común en otros equipos y con el rival deportivo, poniendo el extra que le faltó ante Dorados el fin de semana.
El choque no fue fácil y sólo con personalidad, agallas y un buen gol de Bruno Marioni, en la agonía del tiempo extra, se logró alzar el puño de la victoria.
Monterrey tampoco tuvo un día de campo en su visita a Guatemala para pagar la visita al popular cuadro del Municipal, y con sólo nueve hombres sacó un empate que le basta para continuar en la pelea.
¡Qué diferencia de estos Rayados a los que normalmente vemos como visitantes!.
Habitualmente los regios disminuyen notablemente su accionar cuando salen del Estadio Tecnológico, sin embargo en esta ocasión exhibieron el oficio y el futbol necesario para eliminar a los chapines.
Finalmente, el cambio de cara más notorio lo pudimos presenciar el miércoles por la noche con los Tuzos de Pachuca en su partido ante Boca Juniors.
El Estadio Hidalgo fue anfitrión de un histórico dentro de la Copa Libertadores de América y lució sus mejores galas. Y cómo no hacerlo, si el cuadro xeneize suele tener un poder de convocatoria notable cuando se presenta en cualquier parte del mundo.
Pachuca no pareció en ningún momento la murga que fue goleada en forma inmisericorde por Cruz Azul hace apenas unos días y que arrastra el prestigio en el torneo local.
Lo que vimos fue un cuadro hambriento, rápido de reacción, enchufado y contundente que no sólo peleó sin complejos ante un rival de tronío sino que lo terminó doblando con autoridad.
De lo perdido, lo que aparezca para los cuadros nacionales que, a excepción de Tigres, no parecen andar en la Liga.
El arbitraje brasileño de la Libertadores, pa?l gato.