El Siglo de Durango
Se registra conato de violencia al término de la Asamblea Municipal panista al no concidir el número de votos con las personas que se registraron para participar en la contienda interna; de mil 290 sufragios emitidos, 656 correspondieron a Bernardo Loera Carrillo y 627 a Rubén Velasco Murguía, es decir, una diferencia de 29 votos del primero sobre el segundo.
Todo transcurría con tranquilidad en la contienda para elegir al dirigente del Comité Directivo Municipal del Partido Acción Nacional (PAN) en Durango; desde las nueve la mañana la militancia se dio cita en el conocido auditorio de un universidad privada para registrarse y participar; sin embargo, después de llevarse a cabo la contabilización de los sufragios no coincidieron las cifras, aparecieron votos de más, lo que provocó un conato de violencia entre el dirigente estatal, Bonifacio Herrera Rivera, y algunos militantes.
Este domingo desde temprana hora empezó la movilización de simpatizantes del PAN en el municipio para participar en el proceso interno de este instituto político en el municipio; de acuerdo con el orden del día, en punto de las 11:40 horas inició la Asamblea Municipal en donde se aprobó la lista de delegados numerarios -alrededor de 404- que participarán en la Convención Estatal para elegir candidatos a senador el próximo 18 de diciembre.
Posteriormente se informó que se habían registrado mil 285 delegados a la Asamblea Municipal y los cuales elegirían al líder municipal; Blas Cárdenas, quien ostentaba el cargo hasta este domingo, rindió un breve informe de actividades para después dar paso a la participación de los candidatos. En primer término, Rubén Velasco dio lectura a su discurso en donde hizo una invitación a los panistas a unirse a su propuesta.
Se comprometió durante su intervención a fortalecer este instituto político con la creación de nuevos subcomités en el área rural del municipio de Durango, además de hacer una invitación a formar nuevos cuadros con jóvenes de universidades e instituciones públicas y privadas.
Por su parte, Bernardo Loera, actual diputado federal, pidió el apoyo para el actual precandidato a la Presidencia de República por el PAN, Felipe Calderón Hinojosa, y se pronunció por recuperar los triunfos que no se han logrado desde hace 20 años en el municipio de la capital.
Al concluir los discursos se llevó a cabo la votación, en orden alfabético; hasta este momento no se observaba que pudiera presentarse algún incidente. No obstante, los problemas surgieron cuando se dio a conocer la cifra final de la elección: de los mil 285 resultaron al final de la votación mil 290, es decir cinco votos de más, lo que despertó el enojo de un grupo de simpatizantes de Rubén Velasco, que comenzaron a gritar ?¡fraude, fraude!?, lo que motivó el enojo de dirigente estatal, Bonifacio Herrera Rivera, que se encontraba en el presidium; bajó de su lugar y empezó a increpar a una persona del sexo masculino que pronunciaba las consignas en contra del proceso interno y que con anterioridad lanzó algunos objetos hacia donde se encontraba la comisión encargada de los comicios.
Esta diferencia tornó tenso el ambiente y causó que un grupo de señoras empezara a empujar a Bonifacio Herrera Rivera, por lo que tuvo que intervenir el diputado Juan Carlos Gutiérrez Fragoso.
Después de que se calmaron los ánimos, simpatizantes del grupo ?elizondista? llegaron al lugar donde se desarrollaba la contienda con el notario público número nueve, Humberto Nevárez Pereda, el cual nunca acreditó su personalidad; el fedatario acudió con la intención de dar fe de la contabilización de cada una de las boletas y del registro de delegados de la Asamblea Municipal.
Después del conteo que se realizó, se rectificó que no fueron mil 285 los delegados que se registraron, sino mil 335 y de los cuales 45 no votaron y siete se anularon.
Ya entrada la tarde se dio por concluida esta contienda con la inconformidad del grupo que se identifica como ?elizondista? y que apoyaba la candidatura de Rubén Velasco Murguía.