Agreden luchadores a los aficionados.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En fenomenal bronca terminó la función de lucha libre que se realizó la noche del sábado en el Auditorio Municipal, cuando la pasión se desbordó y decenas de aficionados invadieron los encordados, provocando la ira de algunos luchadores que agredieron a varios espectadores. Los cuerpos de socorro y seguridad brillaron por su ausencia.
El espectáculo de los costalazos se vio empañado, poco antes de dar por terminada la lucha estelar en relevos australianos en donde participaron ?La Parka?, ?Dr. Wagner?, el ?Místico? contra ?Héctor Garza?, ?Último Guerrero? y ?Black Tigre?.
Decenas de aficionados, muchos de ellos bajo los influjos del alcohol, subieron al ring, impidiendo que la lucha estrella culminara, provocando con ello que los gladiadores montaran en cólera y uno de ellos desquitara su coraje con varios de los aficionados, algunos de los cuales ni siquiera habían subido al enlonado.
El rudo, Héctor Garza, ?El Querubín?, oriundo y vecino de la ciudad de Monterrey, Nuevo León, hecho una furia, no pudo ser controlado ni por sus compañeros cuando la emprendió a golpes contra todo aquél que se cruzara en su camino, sin importarle si eran mujeres o niños.
Varios menores resultaron lesionados por la agresión de este luchador, que en su camino hacia los vestidores, soltó golpes a diestra y siniestra, alcanzando de llenó al rostro de Eduardo Alejandro Minor López, de 14 años de edad, que sólo esperaba el paso de sus ídolos para saludarlos y en cambio recibió tremendo porrazo en la ceja izquierda que lo hizo ver estrellas, pero no del pancracio.
Acompañado por su hermano Jesús Adolfo Minor López, de 24 años y su pequeño sobrino Jesús Minor Sifuentes de cuatro, Eduardo Alejandro no fue auxiliado por nadie, toda vez que los organizadores del evento no contaron con servicio médico alguno. Tampoco fue detenido el luchador, puesto que tampoco había la presencia de Seguridad Pública.
Uno de los promotores se acercó al lesionado para ofrecerle pagar los gastos médicos en una clínica, por lo que se acudió a la Cruz Roja, pero en esos momentos no había médicos disponibles. Igual sucedió en el Hospital Regional Militar, por lo que finalmente se trasladaron al Sanatorio Español.
Hasta esa institución acudió Patricia López de Minor, madre de Eduardo Alejandro, quien se entrevistó con el organizador, del cual ignora su nombre, quien le aseguró que todos los gastos correrían por su cuenta, de hecho, que la atención de su hijo ya estaba liquidada, sólo faltaba que firmaran un documento donde se comprometían a no ejercer acción penal ni contra el luchador ni la empresa organizadora.
Esto no le pareció a la enfurecida mujer, quien le respondió que primero deberían certificar que su menor hijo no tendría ninguna consecuencia por el golpe recibido, lo que causó el enojo del promotor que recogió varios papeles y se retiró del lugar.
No pagó la cuenta.
Cuando el menor lesionado intentó retirarse de la clínica con sus familiares, una vez que fue atendido, en administración les dijeron que antes tendrían que pagar la cuenta, lo que suscitó de nueva cuenta el enojo de la familia Minor, pues estaban en la creencia de que el sujeto que se les acercó lo había hecho.
Tras discutir por varios minutos, finalmente tuvieron que desembolsar la cantidad de dos mil 566 pesos, por concepto de las curaciones que se le hicieron a Eduardo Alejandro, a quien tuvieron que aplicar cinco puntos de sutura en la región supraciliar izquierda.
Los quejosos acudieron ayer por la mañana a interponer la formal denuncia en contra de Héctor Garza y quien resulte responsable, toda vez que el Auditorio Municipal estuvo desprovisto tanto de vigilancia policiaca como de personal de primeros auxilios para que intervinieran en situaciones tan lamentables como las que se dieron.
Hasta el momento sólo era ésta la única denuncia presentada en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), pero se espera que más afectados acudieran en el transcurso de la presente semana.