La ley, aprobada por el Congreso el mes pasado, permite a los gays casarse en ceremonias civiles y les concede los mismos derechos que a los heterosexuales.
CIUDAD DEL VATICANO, (Reuters).- El responsable de asuntos familiares del Vaticano calificó el lunes la ley española que permite que los homosexuales se casen como la destrucción de la institución del matrimonio e instó a los cristianos de todo el mundo a que se opongan a dichas uniones.
El cardenal Alfonso López Trujillo, director del Pontificio Consejo para la Familia, también dijo que la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo era una "violencia moral" contra los niños y ponía en peligro su personalidad y estabilidad.
En una entrevista con Fides, la agencia de noticias de la sección misionera del Vaticano, López Trujillo dijo que la ley española que permite el matrimonio homosexual "cambiaba y falsificaba la definición del matrimonio".
La ley, aprobada por el Congreso el mes pasado, permite a los gays casarse en ceremonias civiles y les concede los mismos derechos que a los heterosexuales.
López Trujillo dijo que la ley, junto con el aumento del número de parejas que conviven sin casarse, estaba "destruyendo poco a poco, la institución del matrimonio", que la Iglesia Católica considera una unión vitalicia.
"Se pide a los cristianos, incluso si son funcionarios estatales, que sean objetores de conciencia porque las leyes de las que estamos hablando son profundamente ofensivas a la moralidad", dijo López Trujillo.
El cardenal colombiano dijo que los homosexuales merecían respeto pero permitir que adopten niños "destruye el futuro de los niños (y) sufren violencia moral".
"La gente dice que los niños adoptados por parejas del mismo sexo son felices. Quizá, cuando tienen uno o dos años.
Pero cuando pueden pensar por sí mismos, cuando crecen, qué tragedia cuando tengan que decir 'mis padres son dos hombres, o dos mujeres'. Su personalidad, su estabilidad está en riesgo", dijo.