Agencias
ÁMSTERDAM, HOLANDA.- Un tribunal de Amsterdam condenó ayer a cadena perpetua a un joven islamista marroquí-holandés, Mohamed Bouyeri, por el brutal asesinato del cineasta holandés Theo Van Gogh.
Mohamed Bouyeri, un hijo de inmigrantes marroquíes nacido y criado en Amsterdam, confesó durante el juicio que lo mató "por convicción religiosa", basándose en una interpretación radical del Islam.
Theo Van Gogh, descendiente del pintor Vincent van Gogh y polemista conocido por sus críticas al Islam, fue asesinado a tiros y apuñalado cuando circulaba en bicicleta por el centro de Amsterdam el dos de noviembre de 2004.
"El atentado terrorista contra Theo van Gogh provocó fuertes sentimientos de miedo y de inseguridad en la sociedad" holandesa, declaró el presidente del tribunal, Udo Willem Bentinck.
"El acusado juró durante el juicio que volvería a hacerlo si fuera liberado (...) no hay por lo tanto más que una pena adaptada a este crimen, la cadena perpetua", agregó el juez.
En Holanda, la cadena perpetua se aplica rigurosamente y los condenados permanecen en la cárcel hasta el fin de sus días, salvo si la reina les concede un indulto, lo que sólo ha ocurrido dos veces desde la Segunda Guerra Mundial.
Vestido con una chilaba gris y luciendo una poblada barba negra y un keffieh (pañuelo) negro y blanco en la cabeza, Mohamed Bouyeri permaneció casi impasible cuando se anunció la sentencia que lo envía, a los 27 años, a prisión por el resto de su vida.
Sólo asintió con la cabeza y pocos minutos después abandonó la sala sin mirar a los familiares de la víctima.
En su veredicto, los magistrados recordaron que el acusado "estaba obsesionado por la violencia y por una ideología totalitaria" motivada por una interpretación radical del islam. "A sus ojos, Theo van Gogh era un enemigo del islam y tenía que ser asesinado", precisaron.
En cambio, el veredicto no ofrece casi respuestas sobre las razones que condujeron a Mohamed Bouyeri, un joven marroquí relativamente bien integrado, hacia el islamismo radical.
Durante las audiencias, un especialista en temas islámicos, el profesor Ruud Peters, habló del malestar de la segunda generación de inmigrantes, que a veces se refugia en "una identidad religiosa".
A esa misma generación pertenecían algunos de los presuntos kamikazes de los atentados del siete de julio en Londres, hijos de paquistaníes y descritos también como relativamente bien integrados.
Mohamed Bouyeri también fue hallado culpable de intento de asesinato contra ocho policías, así como de obstaculizar del trabajo de la parlamentaria holandesa Ayaan Hirsi Ali, a quien amenazó de muerte en un panfleto que dejó clavado con un puñal en el cadáver de Theo Van Gogh.
Ella fue la guionista de un cortometraje dirigido por Theo Van Gogh que denunciaba la violencia contra las mujeres en nombre del Corán y tuvo que permanecer escondida durante varios meses tras estas amenazas.
El condenado dispone ahora de 14 días para apelar la sentencia.