Julio Magallanes
El rector de la Universidad Juárez, Rubén Calderón Luján, expresó que no quería “pecar” de optimista, cuando ayer se le preguntó si descartaba el estallamiento de la huelga programada para el 15 de febrero.
Sin embargo, reconoció que en las pláticas de negociación con los sindicatos de académicos y administrativos ha habido una buena disposición de ambas partes, pero sostuvo que hay cosas que están fuera de alcance como el punto de las jubilaciones, que calificó de un problema estructural y toral.
Para dimensionarlo, señaló que dos sindicatos universitarios están planeando casi 200 jubilaciones y que si en estos momentos la UJED otorgara 30 para ambos, requeriría entre 20 y 22 millones de pesos al año; cantidad adicional a los 18 millones de pesos que representan actualmente 160 trabajadores que gozan de esta prestación.
Calderón Luján hizo un breve balance de los resultados de las pláticas con el SPAUJED y STEUJED, y reconoció que a pesar de las limitaciones económicas que tiene la institución ha prevalecido el diálogo, el resto y el buen trato en las pláticas de negociación que comenzaron desde el lunes 7 de febrero.
Dijo que estos factores han permitido avanzar y crear un clima de trabajo muy saludable en los encuentros con los sindicatos universitarios.
“En cuanto a peticiones, lo más difícil y lo más sentido, y que merece todo respeto de la Rectoría es la jubilación”, añadió. Por otra parte, explicó que existe conciencia de que todo aquel trabajador que ya entregó su vida a la institución merece su jubilación, pero también sería irresponsable abrir mucho esta puerta.
El Rector afirmó que las jubilaciones es problema nacional y hasta mundial, y estableció que los alcanzó el tiempo, porque en su momento propuso la integración de una Comisión de Jubilación, integrada por universitarios, para ir socializando y bajando toda esta problemática a los maestros y trabajadores universitarios.
En cuanto a la respuesta al planteamiento de jubilación de los sindicatos, dijo que Rectoría está analizando la respuesta que se dará de acuerdo con las posibilidades económicas, para no caer tampoco en una irresponsabilidad.
Por otra parte, destacó que lo ideal es que en estos momentos todo trabajador universitario estuviera aportando el 17 por ciento de su salario y prestaciones no ligadas al salario, en lugar del 0.07 por ciento de las prestaciones no vinculadas con el sueldo.
Con este 17 por ciento, en un año se podrían juntar 50 millones de pesos, lo que permitirá avanzar más rápido con la formación de capital semilla en el que se llevan 26 millones de pesos, desde hace varios años, y el fideicomiso que se formó, en el 2001, con una aportación de la Secretaría de Educación Pública y que es actualmente de más de 11 millones de pesos.
