Autoridades iraquíes lamentaron el asesinato de Akihiko Saito a mano de sus secuestradores.
Tokio, (Notimex).- El gobierno de Irak confirmó hoy la muerte del rehén japonés, Akihito Saito, desaparecido en esa nación islámica desde hace unos 20 días y cuyo deceso fue dado a conocer en un video del sitio web del islámico Ejército Ansar al-Sunna.
El vocero del gobierno iraquí, Rasha Ali, confirmó esta tarde el deceso de Saito en una conferencia de prensa en Bagdad, capital de esa nación musulmana, en la que informó que los esfuerzos por rescatar al japonés había fracasado, según la agencia local Kyodo.
"El ministro de Seguridad Nacional de Irak, Abdul Karim al-Inizi, condenó el asesinato del rehén japonés a manos de sus captores", indicó un comunicado oficial emitido un poco más tarde, de acuerdo con los reportes oficiales.
Al-Inizi señaló, sin embargo, que "este acto horrible no afectará las relaciones entre los gobiernos iraquíes y japonés", al tiempo que reiteró "nuestro compromiso para detener todos los actos terroristas en nuestro país y estabilizar a Irak".
El gobierno de japonés señaló que estaba cerca de confirmar la muerte de Saito, de 44 años de edad, luego de que el hermano de éste, Hirobonu, identificó al hombre que se mostraba en el video dado a conocer esta mañana por el sitio web islámico de la agrupación.
Hirobonu dijo que tras confirmar que su hermano -quien trabajaba en Irak para la compañía británica privada Seguridad Hart- era el hombre que aparecía en el video, así lo informó a la cancillería y a la policía de esta nación asiática.
Por su parte, funcionarios del gobierno japonés indicaron que "no pueden evitar el pensar" que el hombre abatido sí es Saito, ya que así lo indicó el análisis que hizo la Agencia Nacional de Policía al comparar el video con la imagen del pasaporte.
El video de cuatro minutos dado a conocer este sábado mostró el pasaporte del japonés, desaparecido durante una emboscada a un convoy el pasado 8 de mayo, así como imágenes en las que aparecía tirado en el piso, con brazos extendidos, boca abierta y sangre.
El ejército de Ansar al-Sunna, que reivindicó el asesinato de Saito y precisó que éste falleció a causa de las lesiones causadas durante un combate armado, ya había informado que había herido de gravedad al japonés tras secuestrarle en una embocada.
