EFE
ISLAMABAD, PAKISTÁN.- El Gobierno paquistaní confirmó ayer la muerte de un conocido miembro de la red terrorista Al Qaeda en la zona tribal cercana a la frontera con Afganistán, informaron medios locales.
Se trata de Abu Hamza Rabia, un ciudadano egipcio que actuaba como comandante de la red terrorista Al Qaeda y que era conocido en la zona como “Nawab”.
Según había publicado aye el periódico “Dawn”, Hamza Rabia es uno de los cinco supuestos radicales islámicos que murieron el jueves pasado por una explosión en Waziristán (noroeste de Pakistán).
Fuentes de los servicios de Seguridad dijeron que los cinco radicales islámicos, cuya identidad no fue dada a conocer, fallecieron cuando estalló por accidente una bomba que preparaban.
El suceso se produjo en Mir Ali, una zona tribal en el noroeste de Pakistán, cercana a la frontera con Afganistán, donde actúan varios grupos radicales islámicos.
Sin embargo, el diario paquistaní en inglés “Dawn” dijo ayer que la casa donde estaban los supuestos militantes, todos ellos extranjeros, fue alcanzada por varios misiles.
Según el periódico “Dawn”, Hamza Rabia había escapado a un ataque parecido en la localidad de Mosaki el pasado cinco de diciembre, en el que murieron ocho personas, incluidos su mujer y sus hijos.
Se cree que Hamza Rabia colaboraba estrechamente con el libio Abu Faraj al Libi, responsable de las operaciones internacionales de la red Al Qaeda hasta que fue capturado en mayo pasado.
En los últimos dos años varios cientos de personas, entre ellos 250 soldados paquistaníes, han fallecido en las zonas tribales en la frontera de Pakistán y Afganistán.
El Gobierno paquistaní tiene a decenas de miles de soldados desplegados en la zona fronteriza con Afganistán, donde se cree que se ocultan miembros de los talibanes y sus aliados de Al Qaeda.
Los gobiernos de Afganistán y Pakistán creen que el responsable de Al Qaeda, Osama bin Laden, está escondido en algún lugar cerca de la frontera afgano-paquistaní, al igual que el mulá Omar, máximo jefe de los talibanes afganos.
