AGENCIAS
LONDRES, INGLATERRA.- Los siete países más industrializados del mundo (G-7) han aceptado conceder a las naciones asiáticas afectadas por el reciente maremoto la inmediata suspensión del pago de los intereses de su deuda exterior.
Así lo anunciaron en un comunicado los ministros de Finanzas de ese grupo, que preside este año el Reino Unido. Según el ministro británico de Economía, Gordon Brown, que fue el primero en lanzar la idea, los países asiáticos víctimas del tsunami se ahorrarán anualmente unos cuatro mil 500 millones de euros.
El G-7 llevará la propuesta el próximo 12 de enero al llamado Club de París, foro informal de países acreedores y deudores, para intentar llegar allí a un consenso.
Se cree que los siete -Estados Unidos, Canadá, Japón, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia- llegaron a ese acuerdo después que Japón, uno de los mayores acreedores, comunicase su aceptación.
La suspensión es voluntaria, según señaló el G-7 en un comunicado difundido aquí.
Según éste, no es de esperar el pago de intereses por parte de los países que decidan acogerse a ella hasta que el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hayan completado el análisis de sus necesidades de reconstrucción y financiación y reconozcan que algunos de esos países no pueden pagar sus deudas.
En un comunicado, el G-7 exhortó al FMI, al Banco Mundial, al Banco Asiático de Desarrollo y a otras instituciones multilaterales a que “hagan los mayores esfuerzos posibles para proporcionar asistencia financiera, incluyendo facilidades de emergencia posteriores al desastre”.
El grupo también pidió a la comunidad internacional que analice la forma de colocar un sistema efectivo de advertencia de tsunamis en el Océano Índico.
Según el Banco Mundial, Indonesia e India tienen las deudas externas más elevadas, incluyendo préstamos de países que no pertenecen al Club de París. Dijo que Indonesia debía 132 mil millones de dólares e India 104 mil millones en 2002, el último año con el que se contó con cifras de toda la región.