Más de 100 sacerdotes asistirán a la concelebración y el nuncio apostólico Giuseppe Bertello
PUEBLO NUEVO, DGO.- Después de 18 años al frente de la Prelatura de El Salto, hoy monseñor Manuel Mireles Vaquera la dejará en manos de su sucesor Ruy Rendón Leal, quien será ordenado obispo en una ceremonia en el Auditorio Municipal con la asistencia de más de cien sacerdotes, arzobispos y el nuncio apostólico Giuseppe Bertello.
Con el peso de 77 años de edad, el obispo Mireles Vaquera observa paciente y tranquilo la llegada de su despedida de la Prelatura, donde convivió y mantuvo la responsabilidad moral y espiritual de la feligresía esparcida en 35 mil kilómetros cuadrados de las tierras más inhóspitas del estado de Durango.
No puede negar su dolor de dejar este lugar. Pero luego reacciona para mencionar su amor a sus fieles y sacerdotes de las 15 parroquias que integran la Prelatura, ?me voy pero los llevaré en mi corazón?, expresó con la sencillez y humildad que caracteriza al hoy Obispo Emérito.
Mireles Vaquera ataja: ?no debe haber tristeza este día, sino alegría en todos los fieles católicos de la Prelatura, ante la llegada del nuevo prelado?.
Rendón Leal será consagrado obispo por los arzobispos Francisco Robles, de Monterrey; Héctor González Martínez, de Durango y Manuel Mireles Vaquera, obispo emérito, hoy a las 12:00 horas, no sin antes, a las 10:30, llevar a cabo la gran recepción en la entrada de El Salto.
Será una ceremonia trascendental, añade monseñor Mireles, quien admite no estar satisfecho de su trabajo; falta mucho por hacer en esta Sierra bravía, donde imperan la pobreza y las necesidades de caminos para llegar a cientos de comunidades.
Entre sus deseos no cumplidos está convertir la Prelatura en Diócesis, pero falta mucho material humano para lograr una evangelización a plenitud. Luego señala que le faltó recorrer más su jurisdicción, aun cuando lo hizo en más de una veintena de veces a cada poblado. Una vez más muestra su modestia.
Para recorrer de un poblado a otro necesitaba de diez a 20 horas de camino, de lo cual fue necesario para conocer la pobreza extrema en que viven cientos de familias y el lastre de la sociedad que es el narcotráfico.
Finalmente en 18 años el balance es positivo; monseñor Mireles Vaquera muestra su alegría al deber cumplido y anota: ?me voy encantado con la gente de los municipios de Pueblo Nuevo, San Dimas, Topia, Canelas, Otáez, Tamazula, parte de Durango y Santiago Papasquiaro?.
Llega el tercer prelado
En los 37 años de existencia de la Prelatura, monseñor Francisco Medina Ramírez, de la orden de los Carmelitas Descalzos (qepd), estuvo de 1974 a 1988 y monseñor Mireles Vaquera de 1988 a 2005. Hoy inicia su misión en este lugar monseñor Rendón Leal.
La ley clerical establece que todo sacerdote al cumplir 75 años de edad debe renunciar ante el Papa, lo cual hizo en su momento monseñor Mireles, pero se le permitió mantenerse por dos años más.
Moreles Vaquera fue ordenado sacerdote el 30 de mayo hace 52 años por el entonces arzobispo José María González y Valencia y el papa Juan Pablo II lo nombró obispo, siendo consagrado por Girolamo Prigione, Antonio López Aviña, arzobispo de Durango, y Luis Rojas Mena, arzobispo de Culiacán, el 7 de diciembre de 1982.
