CONSUMO INTELIGENTE.
Temporada vacacional|Necesario extremar las medidas de seguridad.
EL SIGLO DE TORREÓN
Cada año muere en el mundo más de un millón de personas en accidentes automovilísticos.
TORREÓN, COAH.- Ahora que se tiene un pie en la carretera y se está a punto de lanzarse a unas merecidas vacaciones, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), recomienda algunas medidas de seguridad para disfrutar de un buen viaje, pues lo más importante no es llegar primero, sino saber llegar.
A la hora de salir de vacaciones es común hacer una lista con todo lo indispensable: toallas, trajes de baño, crema con filtro solar, lentes oscuros, por citar algunas productos. Sin embargo, es común dejar al final la revisión del vehículo, como el estado de las llantas, los frenos, la suspensión o el sistema eléctrico.
Lo anterior es porque se piensa que el carro se porta bien en la ciudad y que seguramente en la carretera sucederá lo mismo porque ahí hay muy poco tráfico. Idea por demás equivocada, pues las condiciones de ambos escenarios son muy diferentes.
Por otro lado, por lo general no se observan las mínimas medidas de seguridad al conducir, como abrocharse los cinturones de seguridad, situar a los menores en los asientos traseros y a los niños pequeños en sillas portainfantes, evitar el uso de radios y teléfonos celulares mientras se conduce o, peor aún, ingerir bebidas alcohólicas.
Todo lo contrario, a nadie le cuesta trabajo imaginar a una familia ?en vacaciones?: el conductor con una cerveza de lata en una mano y otra en el volate, la mamá en el asiento delantero llevando en brazos al niño más pequeño y los chiquillos en los asientos traseros sacando los brazos por las ventanillas abiertas, disfrutando del sol y de la brisa del mar, eso sí, pero ¿a qué precio?
CIFRAS DE TERROR.
De acuerdo con las estadísticas publicadas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cada año mueren en accidentes automovilísticos de ciudad y carretera del mundo más de un millón de personas, el número de heridos oscila entre los 20 y 50 millones y una gran proporción de estos lesionados presentará secuelas y discapacidad permanente. Por otro lado, más de la mitad de las defunciones afecta a personas de entre 15 y 44 años, de los cuales un gran porcentaje se trata de jefes de familia, lo que se traduce en una gran pérdida en los hogares afectados, tanto en el aspecto emocional como en el económico; este último, se traduce en pérdidas que van del uno al dos por ciento del Producto Interno Bruto nacional (PIB) en los países en desarrollo.
México no está lejos de este panorama, ya que los accidentes de tránsito superan anualmente los 400 mil eventos, tanto en la red carretera federal como en las zonas urbanas y suburbanas, lo que arroja un saldo de más de 14 mil defunciones y cerca de 200 mil personas heridas, que se traduce en pérdidas económicas por 63 mil millones de pesos, incluyendo horas laborales, materiales y costo por atención médica.
Así, los accidentes en general ocuparon el cuarto lugar en causas de muerte en México en el año 2000 ?sólo superados por las enfermedades cardiacas, los tumores malignos y las complicaciones de la diabetes-, y según los nada satisfactorios pronósticos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2020 sólo los accidentes de tránsito ocuparán el tercer lugar en mortalidad mundial.
Por todo lo anterior es importante analizar qué está pasando y de qué manera podemos evitar o disminuir el impacto de los accidentes de tránsito tanto en zonas urbanas y suburbanas como en la red carretera federal.
LAS CAUSAS.
Para poder prevenir, hay que saber qué es lo que provoca los accidentes. Éstas son las causas:
De acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), en nueve de cada diez accidentes la causa es el conductor (vea las tablas anexas), y entre las más frecuentes se encuentra la velocidad excesiva, invasión del carril contrario y no guardar la distancia.
Sin embargo, los accidentes que más vidas y daños materiales cuestan se deben a manejar con exceso de velocidad y bajo los efectos del alcohol (60 por ciento de las personas que han tenido un accidente había ingerido bebidas embriagantes), seguidos de los accidentes en motocicleta, en especial, cuando el conductor no lleva casco protector.
En cuanto a los relacionados con el vehículo (de lo cual en gran medida es responsabilidad del conductor), está en primer lugar el mal estado de las llantas y el exceso o mala sujeción de la carga, seguida de otros agentes mecánicos.
Por lo demás, en uno de cada diez accidentes interviene el entorno, es decir, las condiciones del camino y los agentes naturales. Entre las causas atribuibles al camino están la irrupción del ganado, seguida por objetos dejados sobre la cinta asfáltica, desperfectos de la superficie, pavimento resbaloso, falta de señales y pavimento mojado. Entre los agentes naturales destacan los vientos fuertes, niebla o humo, tolvaneras, lluvia y nieve o granizo, entro otros.
LOS ACCIDENTES SON UNA ?SUMA?.
Ahora bien, si en el viaje de vacaciones se suma una o dos causas atribuibles al conductor, más las del entorno (que no se pueden controlar), se debe estar seguro de que el riesgo de sufrir un accidente se incrementa.
Por ejemplo, si se decidió divertirse un poco más y regresar a casa hasta entrada la noche, dos cosas podrían tenerlo al borde de un accidente: el sueño y la inexperiencia al circular de noche por una ruta que no se conoce bien.
Las medidas....
En mitad de un panorama tan negro existe solución en la medida de las posibilidades de cada quien, pues de acuerdo con la Secretaría de Salud, nueve de cada diez accidentes pueden prevenirse, así, las autoridades han instrumentado algunas medidas al respecto:
El Acuerdo. El consejo de Salubridad General de México aprobó el acuerdo en el que se establecen diversas medidas para evitar y disminuir el impacto de los accidentes de tránsito, que entró en vigor el 20 de noviembre de 2003. Las medias que enumera este documento son las siguientes:
Uso obligatorio del cinturón de seguridad para todos los ocupantes del vehículo.
Uso obligatorio de sillas portainfantes y la ubicación de los menores en el asiento posterior de los vehículos.
Uso obligatorio de casco protector para los motociclistas.
Penalizar el hecho de conducir vehículos bajo los efectos de bebidas alcohólicas, estupefacientes u otras sustancias tóxicas y,
Sancionar el uso de dispositivos de comunicación móvil ?tal como radios y teléfonos celulares- al conducir.
Aunque todo el mundo conoce estas medidas precautorias, muy pocos conductores las practican, ya sea por irresponsabilidad, desidia o falta de costumbre o mera irresponsabilidad, lo cierto es que en México se tiene muy poca cultura con respecto a la seguridad.
