Vecinos de El Pueblito están desesperados por constantes desmanes, escándalos y violaciones
Agobiados por los desmanes, balaceras, escándalos, hasta violaciones contra mujeres y menores de edad, se encuentran los vecinos de El Pueblito, donde acuden durante las noches de los fines de semana personas en estado de ebriedad e inconveniente, sin que la autoridad haga acto de presencia. Cuando lo hacen hay quejas de que roban pertenencias de los habitantes.
Esto responde a las quejas planteadas por los vecinos de El Pueblito, que a decir de ellos son muchos años los que han tenido que lidiar con estas circunstancias, poniendo en riesgo su integridad física, ya que en ocasiones también se han generado balaceras.
Durante las noches de los fines de semana el lugar se convierte en un hotel de cuatro vientos, ya que en su mayoría acuden a ingerir bebidas alcohólicas y enervantes, escuchar música a altos volúmenes; inclusive, a realizar actos sexuales, hasta en plena luz del día. Todos procedentes de los poblados vecinos y del centro nocturno conocido como ?Estampida?.
Al respecto, María Guadalupe Gallegos, vecina del lugar, manifestó que ha tenido altercados con estas personas, debido a que no se retiran del lugar, escandalizan, tiran basura al río, consumen drogas, entre otras cosas.
Señaló que durante el pasado fin de semana hubo un pleito entre varios individuos, inclusive mujeres, donde se registraron heridos, daños en algunos vehículos y al final derivó en una balacera.
Con esto, la señora optó por llamar a la Policía Preventiva para que acudiera a poner orden sobre la violencia suscitada; sin embargo, nunca acudió, pese a que casi mataban a uno de los participantes de la gresca.
María Guadalupe vive cerca de la ribera del río, hasta donde ha tenido que atender a mujeres semidesnudas que han sido víctimas de un intento de violación por parte de individuos que en estado inconveniente tratan de abusar de ellas.
?Es muy común que acudan aquí personas de otros lugares, debido a que se traen mujeres y menores para realizar desmanes y en ocasiones a violarlas, ya que seguido se escuchan gritos por la noche de gente que está siendo atacada, pero por el temor de ser agredidos no salimos?, comenta la señora María.
En este sentido, al igual que Clemente Díaz Soto y Roberto Cabrales, también pobladores del lugar señalaron que han sabido que personas menores de edad y mujeres han sido violadas a lo largo del río; sin embargo, no se han dado a conocer porque no se denuncia.
Por su parte, el señor José Isabel Venegas señaló que las autoridades policiacas nunca acuden a este lugar, lo que genera que haya un descontrol e inseguridad para los vecinos y personas en general.
Hizo hincapié en que hace tiempo había vigilancia policial; sin embargo, pidieron su retiro porque los agentes estaban robándoles sus pertenencias, como refacciones mecánicas, llantas de vehículos, entre otras cosas; empero, urgió la presencia de estas corporaciones, pero de manera legal.
Contaminación del río Tunal genera infecciones en la piel
Vecinos de El Pueblito se quejan de la contaminación que impera en las aguas del río Tunal, hasta donde personas de Durango y otros lugares arrojan sus desechos e introducen sus vehículos para lavarlos, además por la descarga de aguas residuales de otros poblados, lo que está generando que en ocasiones algunos de ellos presenten infecciones en la piel.
Señalaron que en su mayoría los visitantes de otros lugares, principalmente de Durango, están arrojando basura al río; inclusive, han visto a personal de Seguridad Pública ?Ministerial y Preventiva- a bordo de sus unidades lanzando sus desechos.
Lugareños como María Guadalupe Gallegos y José Isabel Venegas, quienes viven ahí desde hace más de 30 años, comentan que antes había peces, lo cual con el paso del tiempo ha desaparecido, por las cantidades de basura que se pueden observar.
Estos desechos son producto de los paseantes, aunado a que en ocasiones acuden camiones de otros lugares para tirar escombro sobre el río, entre otras cosas, las cuales nunca son recogidas debido a que nunca acude el camión recolector, y cuando lo hace es esporádicamente.