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Crece escándalo de corrupción en Brasil

EFE

RÍO DE JANEIRO, BRASIL.- Un asesor de José Dirceu, quien fuera jefe de Gabinete del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, figura en la lista de personas autorizadas a retirar dinero de empresas implicadas en una red de corrupción en Brasil, informó ayer el semanario Veja.

Según un documento divulgado por el semanario en la edición que comenzó a circular este fin de semana, Roberto Marques, importante asesor de Dirceu, figura en la lista de personas autorizadas a retirar recursos de una empresa del publicista Marcos Valerio Fernandes, uno de los principales implicados en el escándalo.

Dirceu, que durante dos años y medio fue jefe de Gabinete de Lula, es considerado la mano derecha del mandatario desde hace varios años y uno de los principales dirigentes del socialista Partido de los Trabajadores (PT), actualmente en el poder.

El ex jefe de gabinete, que era responsable de las negociaciones entre el Gobierno y los partidos aliados, tuvo que renunciar al cargo en junio pasado, cuando comenzaron a aparecer las denuncias según las cuales el PT pagó sobornos a diputados conservadores para garantizar apoyo en el Congreso a las iniciativas de Lula.

Fernandes, vinculado a varios dirigentes del partido oficialista y que ha sido beneficiado con millonarios contratos de publicidad con empresas estatales, es acusado de articular el pago de los sobornos a través de sus empresas de publicidad.

El documento divulgado por Veja y que, según la revista, fue descubierto por la Policía Federal es un fax fechado el 15 de junio de 2003 en el que se autoriza al asesor de Dirceu a retirar 50 mil reales (unos 20 mil 833 dólares) de una cuenta bancaria de una de las empresas de Fernandes.

Según Veja, se trata del principal indicio hasta ahora descubierto de que existía un vínculo entre el publicista acusado de corrupción y un importante miembro del Gabinete. Hasta ahora el Gobierno ha alegado que el escándalo se refiere a negociaciones entre partidos y que en nada se refiere a la gestión de Lula.

Marques, que desde hace años es amigo y asesor directo de Dirceu, a quien llegó a representar en eventos oficiales, alega que desconocía esa autorización y que nunca retiró los recursos puestos a su nombre en el Banco Rural.

En declaraciones al semanario, Marques aseguró que su nombre fue utilizado ilegalmente o que todo se “trata de una trampa para complicarle la vida a José Dirceu”.

Además de obligar a Dirceu a renunciar a su cargo, el escándalo ya le costó el cargo a los principales dirigentes del PT, partido que Lula ayudó a fundar hace dos décadas y que lo llevó al poder.

Según las denuncias, durante los dos primeros años de gestión del líder socialista, el PT, a través de las empresas de Fernandes, pagó “mesadas” por unos 12 mil dólares a legisladores de partidos conservadores para garantizar su apoyo al Gobierno.

El viernes, en un testimonio ante la Policía, el asesor parlamentario Joao Claudio Genu confirmó que recibió maletas de dinero procedentes de las empresas del publicista y que las entregó a varios de los principales líderes del conservador Partido Progresista (PP).

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