Por Virgnia Hernández
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Monex Grupo Financiero reportó un crecimiento en sus operaciones financieras en 2004. A través de sus cinco unidades de negocio (cambio de divisas, fondos de inversión, mercado bursátil, derivados e inversiones internacionales), el grupo ha logrado sumar el servicio de financiamiento al comercio exterior, particularmente en la importación de productos de Estados Unidos, mediante Monex Financiera.
La Sociedad Financiera de Objeto Limitado (Sofol) es la primera en su tipo en ofrecer créditos para los importadores de bienes y servicios de la Unión Americana, servicio que se ajusta a las características de su principal empresa: Monex Divisas. La autorización oficial se dio en noviembre de 2004, mediante la cual la Sofol podía operar los recursos y trabajar de la mano con Ex -Im Bank de Estados Unidos.
Los resultados en la Comarca Lagunera son positivos, dado que se reporta en su resumen de actividades al tercer trimestre del año un incremento en sus operaciones de un año a otro, con un volumen operado en el mercado de cambios por diez mil 194 millones de dólares. El número de clientes que demandan estos servicios fue de 36 mil 277.
En la actividad bursátil, la custodia de valores de clientes ascendió a 12 mil 277 millones de pesos, con un total de clientes inversionistas en instrumentos bursátiles por diez mil 345. El capital contable reportado por Monex Casa de Bolsa fue de 985.607 millones de pesos, a cifras de agosto de 2004. La presencia de este grupo financiero es nacional, a través de sus 42 sucursales distribuidas en toda la República Mexicana.
Durante 2004, el grupo logró la certificación de sus ejecutivos como asesores cambiarios por parte de la Asociación Mexicana de Intermediarios Bursátiles. Aunado a lo anterior, Monex logró en igual periodo, la autorización por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público como administrador de sus Planes Personales de Retiro de las personas físicas.
Dicho esquema se definen como cuentas o canales de inversión que se establecen con el fin de recibir y administrar recursos destinados, en principio, a la inversión de largo plazo, para ser utilizados cuando el titular llegue a la edad de 65 años, o en los casos de invalidez o incapacidad.
Dentro de las ventajas que ofrece este producto es obtener atractivos beneficios fiscales, ya que el inversionista deduce de sus ingresos anuales las aportaciones netas que efectúe a dicha cuenta durante el ejercicio, lo que resulta en el pago de un monto inferior de impuestos o en la posibilidad de obtener un saldo a favor.