EFE
México, DF.- Una ex cuñada del ex presidente mexicano Carlos Salinas ofreció ayer cooperar en el esclarecimiento del crimen de su ex esposo Enrique Salinas, y calificó de incomprensible una orden de detención en su contra emitida por Francia.
Adriana Lagarde, ex esposa de Enrique Salinas, señaló en un aviso de prensa que tampoco se ?explica la campaña mediática? que, dice, se emprendió contra ella tras el asesinato de su ex marido, el seis de diciembre de 2004 en la localidad de Huixquilucan, cerca de Ciudad de México.
Policías de Huixquilucan hallaron el cuerpo de Enrique Salinas, de 52 años, en el asiento del copiloto de un automóvil abandonado y con una bolsa de plástico en la cabeza.
?Mis hijos y yo hemos acudido y acudiremos a toda convocatoria legal, respetando y cumpliendo con la Ley en toda su extensión y en todo el territorio para colaborar en el esclarecimiento del asesinato y exigir que se haga justicia?, señaló Lagarde.
La ex cuñada del ex mandatario Carlos Salinas (1988-94) también criticó a los medios de comunicación por haberla mencionado como sospechosa y rival feroz de su ex marido en una causa por pensión alimenticia, tras el divorcio de ambos.
?Desde la primera declaración de las autoridades judiciales del Estado de México (donde se localiza Huixquilucan), se determinó como motivo de este brutal asesinato la extorsión pasional, y de inmediato y repetidamente se mencionó mi nombre?, se quejó Lagarde en el escrito.
Lagarde relató que vivió con Enrique Salinas y los hijos de ambos en Francia, y que los fondos depositados en bancos de este país y Suiza fueron producto del trabajo de su ex esposo como próspero ingeniero civil, empresario de la construcción y consultor en México, desde antes que Carlos Salinas fuera presidente.
Francia había abierto una causa judicial contra Enrique Salinas por presunto blanqueo de dinero.
La procedencia legal de los fondos ?quedó plenamente demostrado en la exhaustiva investigación realizada durante siete años sobre sus cuentas por la Procuraduría General suiza, la Procuraduría de México, el FBI y la Oficina Antidrogas (DEA por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, que concluyó con su devolución por parte del Gobierno suizo?, afirmó Lagarde.
?Sé que Enrique declaró ante un juez francés pero yo nunca fui notificada por las autoridades francesas sobre algún problema judicial en mi contra?, dijo.
?Por lo anterior, me resulta incomprensible la orden de detención de Interpol girada en abril pasado desde Francia en contra nuestra y hecha pública tras el asesinato?, subrayó.
De acuerdo con Lagarde, la orden de arresto, que le era ?absolutamente desconocida? hasta que ocurrió el crimen, ?sólo pudo ser rastreada mediante un (recurso de) amparo interpuesto? por sus abogados ?para conocer su origen y alcances?.