En muchas ocasiones es necesario lograr una estabilidad hormonal para evitar la producción excesiva de grasa en el cutis y de esta manera erradicar el mal.
EL UNIVERSAL AEE
Las fiestas imponen un ritmo extremo en el cuidado de la belleza, pero en ocasiones las cosas no salen como se desea, por ello es necesario tener un plan B en todo momento. Y esto es debido a que es difícil imaginar a una mujer que no se siente mejor cuando tiene la seguridad de que su apariencia es excelente, con ello aumenta su autoestima y sus defensas, en todos los campos son mucho más fuertes.
Uno de sus principales dolores de cabeza tiene su origen en la apariencia del cutis, la manera en que luce su rostro ante el resto del mundo. Y no se trata de un asunto sin importancia, ya que diversos estudios indican que el cutis graso es mal de muchas.
Entre la población femenina mexicana un 61% sufre por el exceso de grasa en la piel. Quienes padecen esta condición saben que esto les hace sentir incómodas, inhibidas y deprimidas. Además de que les provoca un sentimiento de frustración tratar sus males faciales con métodos que superficialmente ayudan, pero al
final de cuentas no dan resultados efectivos de largo plazo, pues los barros, espinillas y la ya conocida zona "T" brillosa siguen ensombreciendo la cara.
Especialistas en la materia dicen que hay distintas causas que originan este problema, entre ellas, los malos hábitos en la rutina de limpieza facial. Agregan que una alimentación desbalanceada, así como beber poca agua y el clima, entre otras, son razones por las que surgen los problemas del cutis graso.
Pero el principal causante de este asunto es un desorden hormonal o trastornos en la menstruación, que en la mayoría de los casos son factores ignorados, y que confunden o simplemente pasan desapercibidos debido a la falta de información.
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En algunos casos, los productos para uso externo, como jabones hipoalergénicos o antibacteriales, lociones astringentes o tonificantes y las cremas faciales "sin aceite" resultan un tratamiento suficiente para acabar con el problema, pero en
otras situaciones (la mayoría) es necesario lograr una estabilidad hormonal para evitar la producción excesiva de grasa en el cutis y de esta manera erradicar el mal.
Como se trata de una cuestión que afecta a millones de mujeres, surgen todo tipo de productos que prometen curas mágicas, ya que sus fabricantes saben que es una mina de oro, ya que se calcula que una mexicana gasta 300 pesos mensuales en tratamientos para su piel.
Es poco común que se recurra a métodos anticonceptivos para lograr un equilibrio hormonal y así curar este tipo de inconvenientes, sobretodo por la falta de información entre las jóvenes, pero más que nada entre las madres o las mujeres de generaciones mayores, debido a los tabúes que hay en la sociedad mexicana en cuanto a la virginidad y los métodos anticonceptivos. convencionales.
Mas aún, hay un mayor desconocimiento de que muchos métodos hormonales pueden ayudar a beneficiar los problemas de la piel secundarios a desórdenes hormonales, ya que recientes estudios médicos muestran que es la mejor solución para liberarse de esa incomodidad que es el cutis graso.
Para combatir esta molestia hay que visitar al médico especialista en la materia para saber cuál es el origen del problema y de esta manera encontrar la solución más apropiada y efectiva para combatir el problema de raíz.
