Londres, (EFE).- Un destacado cardiólogo británico afirma haberse inspirado en los dibujos anatómicos que hizo el artista y sabio renacentista Leonardo da Vinci (1452-1519) hace 500 años para cambiar su forma de trabajar en el quirófano.
Francis Wells, asesor de cirugía cardíaca en el hospital Papworth, de Cambridge, dice que tuvo una auténtica revelación al estudiar los dibujos y las notas de Leonardo que se conservan en la Colección Real del Castillo de Windsor, cerca de Londres, indica hoy "The Times".
El cardiólogo estudió las detalladas observaciones de los distintos componentes del corazón, el modo de abrirse y cerrarse las válvulas, la expansión y contradicción de los músculos y el bombeo de la sangre.
La revelación se produjo mientras examinaba cómo el artista italiano había explorado la forma en que la sangre afecta al mecanismo de cierre de la válvula mitral, que controla la dirección de la corriente sanguínea.
El pintor de la Mona Lisa muestra en sus dibujos anatómicos del corazón, que acompaña de interesantes anotaciones, una comprensión extraordinaria del mecanismo de cierre de la válvula mitral y de la estructura de eta última.
Hasta ahora, las intervenciones quirúrgicas consistían en estrechar el diámetro de la válvula para limitar el flujo sanguíneo mientras que con el método inspirado por Leonardo no se altera ese diámetro.
"Las explicaciones de Leonardo sobre la forma de la válvula son muy importantes porque podemos repararla mejor" que con el método tradicional, explica el cirujano.
Gracias a esas indicaciones, Wells ha podido restablecer el normal funcionamiento de la válvula mitral en intervenciones quirúrgicas practicadas hasta ahora en ochenta pacientes.
La válvula mitral es como una puerta que se abre y se cierra y controla así el flujo de sangre entre dos cámaras del corazón: una aurícula y un ventrículo.
Si la válvula deja de funcionar propiamente, se limita la cantidad de sangre que bombea el corazón y que llega al resto del cuerpo.
Las valvas o cúspides de la válvula se abren entonces en ambas direcciones y la sangre fluye de regreso del ventrículo hacia la aurícula.
Ello provoca la rápida extenuación del paciente, que se siente sin energía al mínimo esfuerzo.
Hasta ahora, los cirujanos han estrechado el diámetro de la válvula eliminando una sección cuadrada de una de las valvas antes de volver a coserla.
El método inspirado por Leonado consiste en cerrar las aberturas a cada lado de la valva que ha sufrido ese defecto, llamado prolapso de la válvula, y eliminar el tejido sobrante en forma de V.
Este método tiene la ventaja de que no altera el diámetro de la válvula ni afecta por tanto al flujo sanguíneo.