Afirma el abogado defensor de Paul Shanley que apelará la sentencia al calificar que el juicio se basó en "medias verdades y mentiras"
Nueva York, EU (Notimex).- Paul Shanley, una figura central dentro del escándalo de abusos sexuales que sacudió a la Iglesia Católica estadounidense, fue sentenciado hoy a 15 años de prisión por la violación repetida de un niño en los años ochenta.
Shanley, de 74 años, fue condenado hace una semana por violación y asalto indecente a John Harris, ahora un bombero de 27 años que decidió denunciar lo ocurrido al recordarlo cuando se destapó el escándalo en la prensa, en 2002.
El ex sacerdote, muy popular en la archidiócesis de Boston donde servía, se enfrentaba a cadena perpetua, según pidió el fiscal Lynn Rooney quien destacó que Shanley usó su posición de autoridad para ganarse la confianza de los chicos de los que luego abusó.
El abogado defensor Frank Mondano, quien dijo que apelará la sentencia al calificar que el juicio se basó en "medias verdades y mentiras", solicitó al juez Stephen Neel que permita a su cliente cumplir la condena en un correccional y no en una cárcel estatal.
Shanley podrá pedir la libertad condicional cuando cumpla ocho años. No obstante, tras salir de la cárcel estará bajo libertad vigilada durante 10 años.
Durante la vista, Harris señaló que el sacerdote lo violó repetidas veces los domingos después de clases de catecismo en los baños y confesionarios. Los abusos comenzaron en 1983, cuando tenía seis años de edad, y continuaron durante seis años.
En una declaración suya leída por el fiscal, indicó que "quiero que (Shanley) muera en la cárcel. Espero que sea lento y doloroso". Durante el proceso, testificó que el sacerdote le decía entonces que nadie le creería si lo contaba.
Su mujer, presente en la sala, afirmó que "las palabras no pueden expresar mi desprecio por usted. Es un cobarde, se esconde detrás de Dios", mientras que el padre de Harris señaló que "le robó la inocencia a mi hijo, destruyó su entendimiento del bien y del mal".
Documentos de la Arquidiócesis de Boston, el epicentro de las denuncias por abusos sexuales que sacudió los pilares de la Iglesia Católica de Estados Unidos cuando salió a la luz el escándalo en 2002, indican que los superiores de Shanley sabían que abusaba de niños. Por ello, era trasladado a otras parroquias.
La Arquidiócesis de Boston ha tenido que pagar 85 millones de dólares para hacer frente más de 500 demandas civiles relacionadas a varios abusos de sacerdotes católicos.
