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MÉXICO, DF.- Con la participación de 40 universidades de todo el país, la Sociedad de Fomento a la Educación Superior (Sofes) ofrece créditos a estudiantes universitarios para iniciar, continuar o terminar estudios de licenciatura, postgrado, doctorado y especialidad.
Con un plan crediticio, en el que durante el tiempo que duren los estudios sólo se pagan intereses y su respectivo Impuesto al Valor agregado (IVA), los acreditados con calificación promedio anual de ocho tienen hasta el doble del plazo que utilizaron el crédito para pagar a la Sofes.
Esto significa que si un alumno universitario requirió de cuatro años de crédito para cursar su licenciatura, una vez concluidos sus estudios tiene seis meses de gracia para conseguir empleo y enseguida deberá comenzar a pagar las colegiaturas hasta en ocho años.
La Sofes inició su labor en 1997 con un plan piloto en el que se sumaron créditos por tres millones 200 mil dólares a cuenta y riesgo de las primeras universidades participantes.
Sin embargo, el diseño del plan y la forma en que se generó el programa despertó el interés del Banco Mundial (BM) y para fines del año 2000, el monto era de nueve millones de dólares.
Actualmente, el BM apoya esta iniciativa con 21 millones de dólares de un fondo global superior a 150 millones de dólares, aunque los recursos son administrados por el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras).
Para apoyar este tipo de créditos, el Banco Mundial exige certeza de que los recursos serán canalizados a los estratos socioeconómicos que lo requieran, con el propósito de no conceder más ni menos de lo que un solicitante necesita.
Por ello, el aspirante exclusivamente mexicano debe estar dispuesto a someterse a un estudio socioeconómico para determinar el factor de necesidad y el porcentaje de financiamiento, que puede ir desde 20 a 80 por ciento, incluyendo inscripciones y colegiaturas.
La Sofes se constituyó en diciembre de 1996 y fue autorizada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en febrero de 2000 para operar como Sociedad Financiara de Objeto Limitado (Sofol), figura jurídica que garantiza la disciplina y transparencia de los recursos financieros, debido a las regulaciones y supervisión que establece la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Las universidades asociadas de Sofes son instituciones certificadas por la Federación de Instituciones Mexicanas Privadas de Educación Superior (FIMPES), lo que garantiza la calidad académica de todos los programas en los que se ofrece el apoyo crediticio.
De acuerdo con documentos de las propias universidades incorporadas a este sistema y la Sofes, ésta contribuye de manera directa al desarrollo educativo, social, tecnológico y económico del país, mediante el apoyo a estudiantes con buen desempeño académico a través de créditos en condiciones preferenciales.
Algunos de los objetivos de Sociedades de Fomento a la Educación Superior son apoyar con crédito a estudiantes mexicanos con un desempeño académico satisfactorio y cuya situación económica les impida realizar, continuar o concluir sus estudios superiores en una institución socia.
Asimismo, pretende otorgar crédito educativo a más de 25 mil estudiantes de niveles socioeconómicos bajo y medio; establecer las bases de un proyecto a largo plazo, encaminado a mejorar la calidad y la equidad de los servicios educativos de nivel superior en México.
También busca contribuir con el desarrollo del capital humano para aumentar la productividad y competitividad del país, así como ampliar la base de universidades e instituciones asociadas a Sofes, promoviendo su regionalización en las localidades donde el sistema aún no tiene presencia.
Es importante aclarar que el crédito educativo Sofes es un préstamo y no una beca, pues se debe pagar en el doble de tiempo en que se utiliza, siempre que se cumpla con los requisitos establecidos. Este crédito se desarrolla en tres fases, que inician una vez que ha sido autorizada la línea de crédito.
La primera etapa es la de estudios, que es el tiempo en que el estudiante cursa sus estudios. Aquí, el alumno tiene la posibilidad de renovar su crédito en las fechas de inicio de cada ciclo escolar y según las fechas establecidas por la Universidad donde curse sus estudios.
Además, el estudiante debe pagar cada mes los intereses ordinarios del crédito educativo y el IVA de los intereses, o pagarlos por anticipado por todo el ciclo escolar que curse, ya sea semestral, cuatrimestral, trimestral o bimestral. También puede realizar pagos anticipados de capital sin penalización o comisión.
