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LONDRES, INGLATERRA.- Las ruinas de la legendaria Babilonia han sufrido “daños sustanciales” por el uso que han hecho de ellas las fuerzas estadounidenses y polacas desde la intervención militar en Irak, según expertos del Museo Británico.
Tras una visita a la zona el pasado mes, los estudiosos constataron desperfectos considerables en los vestigios de la que fuera la antigua capital de Sumeria, según el estudio del museo británico.
Pese a las objeciones de los arqueólogos, Estados Unidos y Polonia se han servido de las ruinas como depósito militar durante los últimos dos años.
“Se trata de una calumnia comparable a lo que sería establecer un campo militar alrededor de las pirámides de Egipto”, indica el estudio.
Entre los desperfectos, se han encontrado agujeros y grietas en los ladrillos que formaron los famosos dragones del imponente portal de Ishtar.
John Curtis, responsable del departamento del Antiguo Próximo Oriente del Museo Británico, encontró en su visita a las ruinas un pavimento formado por ladrillos de dos mil 600 años de antigüedad destruido por el paso de vehículos militares, así como varias piezas rotas de la escultura al rey Nabucodonosor (605-562 antes de Cristo), recordado por haber ordenado la expulsión de los judíos en el año 586.
El informe da cuenta del hallazgo de arena, mezclada con fragmentos de las ruinas, utilizada para llenar los sacos de las fuerzas militares.
A la luz de esas informaciones, Curtis solicita en el estudio “una investigación internacional, coordinada por las autoridades iraquíes, para establecer los desperfectos causados por las fuerzas de ocupación en los sitios arqueológicos”.
Un oficial estadounidense defendió las operaciones sobre los vestigios babilónicos, a la vez que aseguró que todos los proyectos para retirar tierra habían sido cancelados y de que su país estudiaba trasladar las tropas para proteger las ruinas.
Babilonia se hizo famosa por las gigantescas murallas y jardines colgantes que construyó la reina Semíramis y las obras posteriores de Nabucodonosor.
Estados Unidos asentó allí una de sus bases en abril de 2003, justo después de la invasión de Irak, con el despliegue de dos mil soldados en la zona.
Pocos meses después, la base pasó a estar bajo el mando de las fuerzas polacas hasta el día de hoy, a la espera de que el Ministerio de Cultura iraquí asuma el control de las ruinas.
En el informe, Curtis reconoce que el primer despliegue de tropas sirvió para frenar el pillaje, un fenómeno que se extendió tras la guerra y que afectó sobre todo al Museo Nacional y a la Librería Nacional de Bagdad, pero asegura que es “lamentable” que Babilonia se convirtiera en una base tan importante.