Aquel señor no había estado nunca en un hotel como ése. Era ultramoderno: en él todo se hacía por medio de aparatos. Vio uno con un letrero que decía: "Su peluquero lejos de casa?. Metió en el aparato la cabeza y la sacó con un corte de pelo perfecto. Vio otro: "Su barbero lejos de casa". Acercó el rostro y recibió una afeitada que mejor no se podía pedir. Vio un aparato más: "Su cocinera lejos de casa". Oprimió el botón y tuvo ante sí una comida deliciosa. Por último en la alcoba vio otro aparato. El letrero decía: "Su esposa lejos de casa". Anheloso, el señor puso en el aparato el suyo y luego accionó el mecanismo. Se escuchó un leve zumbido y el hombre lanzó un terrible grito de dolor: el aparato le había cosido un botón ahí donde les platiqué... Al comenzar la noche de bodas el novio le presentó sus pantalones a su flamante mujercita y le dijo con solemnidad: ?-A ver, Rosibel: ponte estos pantalones?, Ella respondió: ?Son demasiado grandes para mí?. ?Ésa es precisamente la lección que quise darte ?dice el tipejo-. Aprende que quien llevará los pantalones en la casa seré yo?. Sin inmutarse la muchacha le entrega a su vez uno de sus diminutos panties. ?A ver ?le dice-. Ahora ponte tú esto?. ?Imposible ?responde desconcertado el tipo-. Es demasiado pequeño para mí; no podría entrar en él?. ?Ésa es precisamente la lección que quise darte ?le dice entonces la muchacha-. A menos que cambies de actitud no entrarás en ellos?... Ayer recibí un mensaje anónimo. No acostumbro atender mensajes anónimos. Éste merece mucha atención: ?Quiero que a través de su leída columna muchos padres de familia como yo se enteren de una desgracia acaecida en mi casa, para que estén prevenidos y no les suceda lo mismo. Me es muy duro escribir esto, pero que de algo sirva lo que nos pasó. Yo vengo de una familia modesta. No tuve automóvil sino hasta varios años después de casado. Cuando mi hijo creció y me pidió tener su coche yo se lo compré, aunque sólo tenía 15 años, pues quería que mi hijo tuviera lo que yo no pude tener a su edad. A los pocos días mi hijo se subió a la acera con el automóvil y aplastó contra la pared a una niña. Yo quería darle confianza en sí mismo, pero con lo que sucedió no creo que vuelva a tenerla nunca. Espero que al leer lo anterior muchos padres mediten en lo que no medité yo: el peligro de dar a sus hijos una responsabilidad que por su edad no están preparados para afrontar...?. Con frecuencia sabemos de accidentes causados por muchachos, casi niños, cuyos padres quisieron darles lo que ellos no tuvieron. Y lo consiguen, como en el caso del dolorido padre que me envió ese mensaje, cuyo hijo tiene ahora algo que él no tuvo jamás: un remordimiento que le durará toda la vida... Un viudo de 70 años se consiguió una novia de 30. Las hijas del señor se preocuparon. ?Considera bien las cosas, padre ?le dijeron-. Dentro de diez años tú tendrás 80, y ella, a los 40, estará en la flor de la edad?. El señor se queda pensando un poco y luego dice: ?Tienen ustedes razón. Dentro de 30 años ella tendrá 60. ¿Para qué quiero yo una mujer sexagenaria??... Pepito le pregunta al profesor: ?Maestro: ¿qué quiere decir ?pro???, Responde el docente: ?La palabra latina ?pro? quiere decir ?por?. Te daré un ejemplo: ?Pro patria pugnavit?. Eso significa: ?Peleó por la patria??. ?-Caray ?se conduele Pepito-. Si ?pro? significa ?por?, entonces pobre de mi primo?. ?¿Por qué?? ?se extraña el maestro. Explica el niño: ?Es que se llama Próculo?... FIN
