La maestra escribe en el pizarrón: "En mis vacaciones me haburrí". Les pregunta luego a los niños: "¿Cómo debo corregir eso?". Responde sin vacilar Pepito: "La próxima vez llévese un amigo"... Le dice un tipo a su compañero: "Qué botas tan especiales traes. ¿De qué piel son?". Contesta el otro: "Hace dos meses mi tío Audacio y yo fuimos a cazar lagartos". "Ah, vaya -dice el amigo-. Las botas son de piel de lagarto". "No -replica el otro-. Son de piel de mi tío"... Babalucas sufría mucho, pues bien se daba cuenta de la escasez y cortedad de su cerebro. Cierto día que caminaba tristemente por la calle vio algo que brillaba en un basurero. Recogió el objeto: era una lámpara de forma extraña. La frotó para limpiarla, y de la lámpara surgió un genio de oriente. "Me has liberado de mi prisión eterna -le dice con grave voz el gigantón-. Pídeme un deseo y te lo concederé". Responde con ansiedad el badulaque: "¡Quiero ser más inteligente que todos los hombres del mundo!". "Muy bien -concede el genio-. Pero ¿no te importará tener tres días de molestias cada mes?"... Iba el trailero por la carretera y un gorrioncito se estrelló en el parabrisas de su enorme vehículo. El hombre, compasivo, se detuvo y recogió al pajarillo. Grande fue su alegría cuando vio que sólo estaba privado de sentido. Lo llevó a su casa, lo puso en una jaulita y colocó la jaula junto a una lámpara a fin de que con su calor la avecilla se reanimara. En efecto, horas después volvió en sí el gorrioncito. Paseó la vista a su alrededor, miró los alambres de la jaula y exclamó lleno de aflicción: "¡Estoy tras las rejas, en la cárcel! ¡Seguramente con el tzingadazo destrocé el tráiler y se mató el pobre trailero!"... Se encontraron dos amigos. Dice uno: "Voy con el médico a que me haga mi chequeo anual". Declara el otro: "A mí no me gusta que me chequen ahí"... AVISO IMPORTANTE: En el curso de esta semana saldrá aquí un chascarrillo que seguramente será calificado como el más lépero que he escrito desde el principio del año que se va. Espérenlo mis cuatro lectores, y den constancia de su extremada peladez... ¡Clap clap clap clap clap clap clap! ¿A quién dedicas ese aplauso, columnista, tanto más sonoro cuanto que lo diste con las dos manos? Lo dedico al Presidente Fox y a su administración, por haber ratificado la decisión de México de apoyar el establecimiento de una corte internacional creada para castigar a quienes atenten contra la persona humana y violen su dignidad y sus derechos básicos. El gobierno de los Estados Unidos se opuso a la creación de ese organismo, pues a la manera del imperio romano se siente absoluto, es decir absuelto de cumplir las leyes que a los demás obligan, y presionó en forma inmoral a México para impedir su voto favorable a ese tribunal. Nuestro país se negó a plegarse a esa soberbia pretensión, y ahora Bush, como niño que rompe un juguete en venganza porque no le dan otro, anuncia que retirará el apoyo que el gobierno estadounidense da a México para combatir el narcotráfico. Estupidez supina es ésa, toda vez que el tráfico de drogas daña principalmente a la nación vecina. Reconozcamos todos la digna actitud del Presidente Fox y su gobierno, y lamentemos la amenaza que representa para el mundo este nuevo imperio que ninguna otra fuerza tiene ahora frente a sí, y que por eso cree ser dueño del mundo. Con estas líneas expreso mi más enérgica protesta ante esa actitud, y conmino al gobierno americano a cambiar su modo de ser lo antes posible... FIN.
