El famoso artista ciego fue invitado a compartir la cena con los socios y socias del Club de Nudistas Veteranos. Al comenzar el ágape, el artista se sintió obligado a pronunciar un brindis, de modo que, puestos todos de pie, dijo lo primero que se le vino a la boca. Al terminar dijo a su compañero de asiento: "-¡Qué personas tan amables estos nudistas veteranos! En realidad no dije nada, y me tributaron unos aplausos ensordecedores". "-No fueron aplausos -le corrige en voz baja el otro-. Es que se sentaron"... En la clase de catecismo pregunta el señor: "-A ver, Pepito, dime: ¿quién fue la madre de Moisés?". "-La hija del Faraón" -responde sin vacilar Pepito-. "-Te equivocas -dice el padre-. La hija del Faraón se lo encontró flotando en una canasta sobre el Nilo". "-Bueno -contesta Pepito con una sonrisa-, eso es lo que ella dijo"... ¿Cuál es la diferencia entre un señor que tiene 15 hijos y un tren inglés? El tren inglés siempre sale a tiempo... A aquella señora no le gustaba ir al consultorio del dentista. Un día, sin embargo, hubo de ir con el odontólogo. Le dice llena de inquietud: "-No sé qué prefiero, doctor, si esto o dar a luz". "-Pues decídase, señora -le pide el facultativo-, para saber cómo debo poner el sillón"... Está bien que la Naturaleza cause desastres: no lo puede evitar, es su naturaleza. Pero que los provoquemos los hombres es locura. La destrucción de las selvas es un desastre que habrá de provocar insospechadas consecuencias. Cientos de miles de hectáreas de selva son arrasadas cada día en todo el mundo. Con eso no sólo se pierde una riqueza de flora y fauna que es irrecuperable, también se alteran las condiciones climáticas del planeta. Nuestro país no es ajeno a esa depredación. La selva lacandona, por ejemplo, es objeto de destrucción constante. En el sureste mexicano la ambición de riqueza y la ignorancia se combinan para devastar la selva, igual que en otros puntos del país se hace con los bosques. Muchas malas conductas han derivado de la expresión según la cual el hombre es el rey de la creación. Con ese título se ha considerado dueño de lo creado, y lo destruye. No es rey de la creación el hombre: es una criatura más en la infinitud del universo, y debe respetar a las demás criaturas, y actuar de modo tal que todas puedan convivir, según su propio ser, en la casa común, nuestro planeta. ¡Cuántas cosas tenemos todavía que aprender, y cuántas ignoramos -o fingimos ignorar- en lo que hace a la conservación de la naturaleza! Al atentar contra ella contra nosotros mismos atentamos, y contra nuestros hijos y los hijos de ellos... Le cuenta doña Frigidia a una amiga: "-Finalmente mi esposo encontró anoche la forma de satisfacerme". "-¿Ah, sí? -se interesa la amiga-. ¿Qué hizo?". "-Se fue a dormir en otro cuarto" -responde la mujer... Himenia Camafría, madura señorita soltera, se quejó en la demarcación de policía de haber sido violada por un tonto. "-¿Por un tonto?" -se extraña el encargado. "-Sí -explica la señorita Himenia-. Tuve qué decirle cómo"... "-Sí me quiero casar contigo, Rosibel -asegura Mercuriano-. Pero has de recordar que soy jefe de compras, y antes de adquirir algo siempre pido una muestra". "-Muestra no te puedo dar -le indica Pirulina-. Pero referencias te puedo ofrecer muchas"... La guapa optometrista, joven mujer de abundoso caderamen, examinaba a un viejito antes de indicarle nuevos lentes. Lo hacía leer la carta de letras que tenía en la pared. Empieza el viejecito: "-S... P... W... M... K...". En ese monento el papel se desprende de la pared y cae al suelo. Se inclina la optometrista para recogerlo. Y dice el viejecito: "-O..."... FIN.