Se responsabiliza de los ataques la Organización para la Yihad en Mesopotamia.
EFE
El Cairo, egipto.- El presunto líder de la organización de Al Qaeda en Irak, Abu Musab al Zarqawi, amenazó ayer con lanzar ?una guerra total? contra los shiies y contra todos aquellos que apoyen el borrador de la nueva Constitución, según la cadena árabe Al Jazzera.
Al Zarqawi, supuesto dirigente de la organización de Al Qaeda para la Guerra Santa en Mesopotamia, aseguró en una grabación de voz atribuida a él que ?los shiies son los que asaltan Tal Afar con sus ataques y la organización no será misericordiosa con ningún shii en Irak?.
El terrorista jordano también pidió a todas las tendencias iraquíes que ?se enfrenten a las agresiones y a los crímenes y se liberen del Gobierno del shii Ibrahim al Yafari (primer ministro iraquí)?.
La Organización para la Yihad en Mesopotamia se responsabilizó ayer horas antes, en un comunicado difundido en Internet, de los atentados que acabaron con la vida de más de 150 personas en Irak.
El día de ayer decenas de personas perdieron la vida, en doce atentados perpetrados en Bagdad, en el segundo día más sangriento de la posguerra, ocurrido apenas un mes antes del referéndum sobre la Constitución iraquí.
El ataque más cruento se produjo en el barrio shii de Kadimiya, en el norte de la capital, donde un suicida al volante de un vehículo cargado de explosivos segó la vida de 113 personas e hirió 162, según el último balance del Ministerio de Sanidad.
Según el relato de los testigos, sobre las 06:50 hora local, el kamikaze se lanzó contra una multitud, que en su mayoría eran obreros de la construcción, que se apelotonaban ante un edificio oficial en espera de obtener un trabajo.
Horas antes de que se explotara ayer el primer suicida, una partida de hombres armados asesinó a sangre fría a 17 miembros de una misma familia en la ciudad de Tayi, a unos 30 kilómetros al norte de la capital.
De acuerdo con la versión de la Policía, sobre las 04:00 de la mañana hora local, los pistoleros, vestidos con uniformes militares, irrumpieron en la ciudad, congregaron a los habitantes y eligieron a 17 hombre de la tribu Tamim, a los que acribillaron a balazos.
A media mañana, otras once acciones violentas, la mayoría de ellas obra de suicidas, mataron a más de una veintena de personas en diversos puntos de Bagdad.
Seis de ellos tuvieron como objetivo principal convoyes militares norteamericanos, mientras que los cuatro restantes afectaron a caravanas de la Policía iraquí.
Además, cuatro civiles perdieron la vida y 22 resultaron heridos en un atentado suicida con coche bomba perpetrado a las puertas de una oficina del clérigo radical shii Muqtada al Sadr, en el barrio de Al Chola, en el noroeste de la capital.
En el puente de Al Dulai, que atraviesa el Tigris en el barrio de Al Hurriya, en el noroeste de Bagdad, tres agentes iraquíes fallecieron y tres resultaron heridos al estallar un coche bomba conducido por un suicida al paso de su convoy.
En una acción similar murieron otras tres personas, entre ellas un policía, en el barrio de Al Alawi, ubicado en el oeste de Bagdad. En la plaza de Antar, corazón del barrio de Adamiya, otro vehículo cargado de explosivos cercenó la vida de un policía causó heridas a diez civiles.