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BAGDAD, Irak.- Dos suicidas con coches-bomba que atacaron con un minuto de diferencia y a un kilómetro el uno del otro, mataron a por lo menos siete policías en el sur de Bagdad ayer, elevando la cuenta de víctimas en la capital ayer a por lo menos 31, dijeron las autoridades.
Horas antes, el primer ataque del día, también un suicida con coche-bomba, mató a 16 policías y cinco civiles en el mismo vecindario, en una nueva ronda de violencia tras la jornada más sangrienta de la guerra en Bagdad.
Tres civiles murieron al estallar un artefacto bajo un autobús del Ministerio de Industria en el este de la capital. El ataque dejó 13 heridos, dijo el teniente coronel de la Policía, Ahmed Abbod.
Fuerzas estadounidenses y policías iraquíes recorrían el barrio Al Dora de Bagdad, donde se concentraron los ataques de ayer, para advertir a los vecinos que permanecieran en sus casas porque se tenían noticias de otros cinco ataques, dijo el capitán de Policía, Ali Abdul Hamza. Las calles estaban desiertas.
Al Qaeda en Irak dijo que realizó los ataques de los dos días.
El principal vocero militar en Bagdad, mayor general Rick Lynch, dijo que los insurgentes estaban desesperados porque los iraquíes se aprestaban a votar en el referendo del 15 de octubre sobre una nueva Constitución.
“Recuerden que la democracia significa el fracaso de la insurgencia. Debe haber una conciencia mayor ahora que nos acercamos al referendo... Eso es poder, eso es avanzar hacia la democracia”, dijo Lynch en conferencia de prensa.
Para iniciar la conferencia, al día siguiente de la tremenda carnicería en Bagdad, habló de mejoras en el sistema de transportes y dijo que “podría dedicar toda la conferencia de prensa a las buenas noticias”.
El principal dirigente de Al Qaeda en Irak, Abu Musab al Zarqawi, supuestamente declaró la “guerra total” contra los shiitas, los soldados iraquíes y el Gobierno en una cinta de audio difundida el miércoles en un portal de Internet dedicado a proclamas islámicas extremistas.
El ministro de Defensa iraquí, Sadoun al Dulaimi replicó en una conferencia de prensa ayer.
“No retrocederemos ni callaremos. No habrá lugar para ustedes en un Irak íntegro. Los perseguiremos dondequiera que vayan”, dijo.
