SUN-AEE
SAN DIEGO, EU.- U2 hizo explotar el Sports Arena de esta ciudad con sus más de 15 mil espectadores que gritaron y corearon cada uno de sus temas, desde los clásicos como One hasta los de su reciente material How to Dismantle an Atomic Bomb.
Los irlandeses arrancaron aquí el Vértigo Tour 2005, gira mundial que lleva el nombre del primer sencillo del nuevo disco.
Bono, el líder del grupo, diría durante el concierto que ?fue una buena decisión iniciar en San Diego y gracias a toda la gente que vino de México?. Lo que hizo recordar cuando prometió que no regresarían a ese país por la golpiza que los guardaespaldas del hijo mayor del ex presidente Ernesto Zedillo dieron a un integrante de su equipo de seguridad.
Pasaban algunos minutos después de las nueve de la noche de ayer. Los fans ya esperaban ansiosos a la banda, unos minutos más y el escenario se iluminó. Caían papeles brillosos de colores cuando apareció Bono interpretando City of Blinding Lights.
Apenas se estaban calentando los ánimos de los espectadores, cuando Bono preguntó: ?¿hablan español??. Los gritos empezaron para dar respuesta afirmativa, pero al escuchar el ?uno, dos, tres, catorce, hello, hello...? de Vértigo, el estadio tembló.
Pequeños de entre diez y 12 años y sus padres se saben las letras: ?las nuevas y las viejas?, dicen emocionados. Y es que Bono, el baterista Larry Mullen Jr., el bajista Adam Clayton y el guitarrista The Edge han mantenido vivo por 25 años a U2.
Temas clásicos o nuevos hicieron cimbrar las paredes y el piso del estadio con los cantos, gritos y brincos de los presentes.
Muchos con los celulares en alto para que del otro lado de la línea escucharan a U2 en vivo.
Siguió Sometimes you can?t Make it on Your Own, que habla de la culpabilidad de Bono por la falta de comunicación que tuvo con su fallecido padre.
Bono, el hombre que no deja fuera la política e igual se ha reunido con Bush, Chirac con el Papa, Kofi Annan o con el multimillonario y filántropo George Soros, pasa a uno de los momentos más emotivos del concierto.
