?La tarde pardeaba y la laguna quieta, la figura de Rodolfo
Fierro y su caballo poco a poco se fueron hundiendo en el fango, la causa fue el peso de las alazanas (monedas de oro) que Fierro, el fiero lugarteniente de Villa
llevaba en sus alforjas?.
P. Hunt. La caída del sol
La corrupción en México tiene nombre y apellido y se llama ?Dinero, Producto de la Corrupción? y su triunfo camina paralelo con la historia en la clase política de México, antes fueron los conquistadores quienes inclusive en algunos navíos por el peso del oro que llevaban rumbo a Europa, se hundieron con todo y su carga.
Después de la ?Conquista?, fueron los militares los que en sus manos tomaban y tenían las riquezas, compartida por la Iglesia.
La familia revolucionaria por muchos años ha tenido secuestrado el territorio nacional y entre ellos el botín alcanza dimensiones con predios, prebendas y dinero en cantidades incalculables.
Don Miguel Alemán rompe el paradigma de la ?bota militar? en la cúpula ya con el PRI como partido y con él como presidente de la República comienza lo negro del pantano apestoso del dinero.
La mayoría de los fraudes y usufructos en México han quedado sepultados bajo toneladas de fango y son más los hurtos de los que nadie sabe o supo en México, que los conocidos.
Y más allá de lo que se robaron los anteriores gobernadores y funcionarios, todos quedaron y siguen impunes, esto es aún más perversos y demuestra que el pueblo está desarmado ante la turba de truhanes y la pandilla de bandoleros que nos han gobernado y que inclusive en plena época neoliberal y posmodernista siguen haciéndolo, construyendo fortunas de muy negro origen y lo peor que con ese dinero mal-habido se siguen comprando conciencias y estimulando la miseria que conlleva la ignorancia.
El político rata no se expone a nada como lo hacen las bandas del crimen organizado que se enriquecen, pero a sabiendas del riesgo que corren e inclusive va de por medio su vida y la libertad, en los políticos y funcionarios públicos y líderes nunca se ha visto eso, salvo dos o tres excepciones que son presentados y ventaneados pero nunca pisan el ?bote?.
Los pleitos de cuentachiles de los priistas que se cobran facturas entre sí con mordidas que como uso y costumbre siempre han existido en este partido y sobre la ?lana? que los hijos de Arturo Montiel se rapiñaron no es nada comparado con otros hurtos.
Si a René Bejerano le faltaron bolsas para echar dinero, ¿cómo le hizo el PRI para hacer el trasiego de más de mil 300 millones en billetes de baja denominación que se robó de Pemex en el año 2000?
En esa ocasión las pacas de lana no cabían en la caja de la camioneta cuando se hizo el traslado, eso sólo como una muestra de lo que se roban en esa paraestatal en manos de unos cuantos rufianes.
¿Dónde esconde la profesora Elba Esther Gordillo los más de 20 millones de pesos por quincena que recibe de cuotas de los profesores?, ¿dónde metió tanta lana Zedillo al trasladar los más de 70 millones de dólares para Estados Unidos y Canadá cuando se autovendió parte de los Ferrocarriles Mexicanos?
Y Raúl Salinas, ¿cómo pasó la aduana con los más de 120 millones de dólares con destino a Irlanda y Francia? Ahora que los descubrimientos de hurtos son el hilo negro de la política y que ésta se da en dinero, propiedades, información confidencial y privilegiada, tráfico de influencias, nepotismo (hermanos, hijos, sobrinos y hasta amantes metidos en la Administración), el caso más reciente los hijos de Marta Sahagún de Fox, escándalo de dinero de procedencia inexplicable pero muy explicable para el pueblo. Aquellos funcionarios y amigos del Gabinete de Luis Echeverría y López Portillo que como golondrinas agoreras volaban con su dinero ante las devaluaciones, sólo ellos tenían la información días antes de las devaluaciones.
En México no sólo los de la cúpula roban, existen miles de presidentes municipales que doblan en hurtos y dineros mal-obtenidos a muchos encumbrados políticos y que decir de los gobernadores que dejan a sus Estados temblando (Guerrero Mier en Durango por citar uno) y como partícipe es el mismo Gobierno Federal que tapa el fango dejado por estos ricos personajes de la política nacional.
Aquí lo grave del asunto es que en México los robos, rapiñas y corrupción en vez de disminuir son cada día más descarados los abusos que se cometen y sólo sirven para evidenciar a los enemigos entre las distintas gavillas de monifatos y gandallas y su interés no es devolver el dinero, sino sólo enconar más la evidencia insensata que da la rivalidad del oponente político aunque sea de su mismo clan o tribu como acaba de pasar con Madrazo, la Gordillo y Montiel, echando abajo la sentencia de que -perro no come perro-.
Cortinas de humo van y tolvaneras levantan polvos que empañan la vida de los mexicanos y sólo queda un pobre remolinito en los megafraudes como el Robaproa (IPAB), la Aseguradora Hidalgo, Lotería Nacional, como estarán las ratas del país que hasta la Cruz Roja y el Fondo para Desastres, (Fonden), han llegado las rapiñas y eso sin contar una saqueo silencioso que se da a nivel nacional con los miles de comisionados o aviadores en las distintas dependencias, ?Conquistas Sindicales?, en este lodazal que otorga el dinero mal-habido.
¿Qué pasará con los hermanos Bribiesca en Guanajuato, los Montiel en el Estado de México, los Medina en el municipio de Matamoros? De nada de eso pueden estar seguros, mientras el pueblo siga ciego, mudo, sordo y sin quererlo cómplice silencioso... es tiempo de comenzar.
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