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Del tintero/Siguen tronando los tiros

Fidencio Treviño Maldonado

La respuesta del respeto a los padres y maestros por parte de los niños, adolescentes y hasta adultos, se ha esfumado por las coladeras del poder, por el círculo vicioso, las circunstancias y modismos, el estado que guarda la economía y los nuevos modelos de corrupción del Gobierno, de algunos poderes judiciales y en parte la sociedad ahora metida en el neoliberalismo y escándalos en México.

En nuestro país el Gobierno involucra olímpicamente a la sociedad, a los padres de familia a los profesores, inventa programas, hace concursos sobre temas de la droga y violencia, simposios y es bastante retórico en sus anuncios en prensa, radio y televisión con concesiones temporales dirigidos a consumidores y prospectos a la droga, sin embargo, ellos, los gobernantes, el sistema de justicia y las distintas corporaciones son en este caso a los que la sociedad les paga y en algunos casos muy buen salario para combatir el crimen.

El crimen sí paga y ha quedado demostrado, la prueba es que en sólo en 2003 las mafias negociaron más de 200 billones de dólares en el mundo en droga y otros negocios turbios, en 2004 la cifra superó en mucho a la anterior y en lo que va de este año 2005 sólo en América Latina contando producción, comercialización, distribución y consumo el crimen organizado ha superado los 150 billones de dólares (datos: DEA, INFC y ALET) esta última filial de las Organizaciones No Gubernamentales de Canadá y otros países.

Las condiciones en América Latina están dadas y son provocadas en algunas veces por los mismos gobiernos sin una pizca de capacidad para combatirla y casi todos con un Poder Judicial en manos de los mismos políticos sin una sola razón de autonomía, otra de las causas es la pobreza y miseria, el desempleo y la poca credibilidad en los procesos electorales con las viejas reglas, donde en las formas, tiempos y los métodos usados está presente la supremacía del régimen y de un sistema ineficaz e indeseable y hasta perverso.

Los cuerpos sembrados en la República Mexicana fueron primero una alerta, después una cifra, ahora un escándalo, sin capacidad de asombro y pronto no sólo una copia de Colombia sino superando a ese país sudamericano. (El estado de Oaxaca y Guerrero son tercero y cuarto lugar a nivel mundial en muertes violentas).

La desconfianza, el miedo, los secuestros, la droga, el crimen organizado crece como la grama. El hampa de pronto se apoderó de las calles, de las colonias y sus callejones, secuestró a pueblos enteros, los tiros son el pan diario en pueblos como Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Tamaulipas, donde en este año ya son más de cien ejecutados no respetando sexo, rango o status social, los sicarios siguen manejando armas de uso exclusivo del Ejército Mexicano y si se quiere algunas que ni los mismos cuerpos de seguridad tienen.

El silbar de balas también se escucha en Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Tijuana, en Juárez Chihuahua y qué decir de Sinaloa donde el gobernador Bours declara que es normal y cada año supera el récord de muertes violentas.

En Nuevo Laredo con la llegada de los agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) el día 13 de junio, a la fecha iban 75 muertes pero de la llegada de esta corporación y el plan México Seguro ya cuentan con 45 ejecutados, antes se daba una ejecución cada 87 horas y ahora cada 33 horas...

En México con el plan México Seguro se asesina un policía cada seis días, mientras antes el promedio era de un agente policiaco cada 20 días...

El ramillete de buenas intenciones de grupos gubernamentales y Organizaciones No Gubernamentales de nada han servido, la lucha contra las drogas no se terminará con iniciativas e institutos, menos con formación de consejos u patronatos, la lucha debe hacerse sin contemplaciones, con fuerza y aplicar todo la Ley que da la justicia contra las mafias y sobre todo hacer una limpia en los cuerpos de seguridad, es decir comenzar por su propia casa, sacudir y barrer tanta podredumbre que existe en los diferentes autoridades y nuestro podrido sistema de justicia, que más que jurídico es un tianguis.

En fin, Pobre México con un pasado reciente lleno de corruptelas, con un presente inmerso en la indolencia y con un futuro incierto, desesperanzado sin hombres cabales en la política, sólo unos mequetrefes llamados funcionarios y servidores públicos tras el poder brincando como los micos de rama en rama para seguir en las lianas del dinero fácil, o peor aún, como los canguros cargando con bolsas repletas de lana.

Mientras en las fronteras calientes y callejones arrabaleros siguen tronando los tiros, nuestros bien pagados, honrados, ínclitos y probos H. legisladores sólo se preocupan por los precios y marcas de los vestidos y chones de nuestra primera dama y por la píldora, cápsula o pastilla del “día siguiente”.

-¿Y nosotros qué?, me pregunta mi sobrina Martha que vive en la colonia Madero de Nuevo Laredo, Tamaulipas- que vivimos desde hace tiempo atrincheradas, encerradas en nuestras casas, tras gruesos barrotes, indefensas y cuando truenan los tiros sólo esperando que una bala perdida no nos toque.

Correo electrónico: linga_1031@hotmail.com

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