Agencias
WASHINGTON, EU.- La NASA todavía está festejando la exitosa detonación de un proyectil contra el cometa Tempel Uno.
Sin embargo, por ahora, el champagne tendrá que guardarlo en el refligerador, ya que la Agencia Espacial Estadounidense (NASA, por sus siglas en inglés) deberá defenderse -por este hecho- de una demanda multimillonaria presentada por una astróloga rusa por “trauma moral”.
La escritora Marina Bay, una astrologa aficionada, asegura que al estrellar la sonda contra el cometa, la agencia espacial estadounidense puso en peligro a la civilización y pidió una indemnización de 300 millones de dólares por el “trauma moral” que le causó el evento; curiosamente, lo mismo que la NASA gastó hasta ahora en el proyecto Deep Impact (Impacto Profundo).
“Nadie ha demostrado que este experimento era seguro”, dijo el abogado de Bay, Alexander Molokhov y agregó, con un dramatismo extremo, que “este impacto podría alterar la órbita del cometa, así que hay una posibilidad de que el Tempel Uno pueda un día ocasionar la destrucción de la Tierra”.
La afirmación de la astróloga fue desechada por el ingeniero de la misión de la NASA, Shadan Ardalan, quien aseguró que “la analogía es el impacto de un mosquito contra la parte delantera de una avión de pasajeros en pleno vuelo. El efecto es insignificante”.
Los representantes de la agencia espacial estadounidense en Moscú han ignorado la audiencia del tribunal. Sin embargo, bajo la Ley rusa eso no impide que el juez Litvinenko, a cargo del Tribunal donde se realizó la demanda, continúe con el caso.
El equipo legal de Marina Bay sigue teniendo confianza en lograr la victoria e incluso está buscando voluntarios para que se unan a su causa.
“El impacto cambió las propiedades magnéticas del cometa y esto podría afectar la telefonía celular en la Tierra. Si su teléfono no funciona, entonces pregúntese usted la razón y luego póngase en contacto con nosotros”, indicó Molokhov.
Le tocará ahora al tribunal moscovita de Presnya encontrar la respuesta a esta pregunta verdaderamente universal. Se espera que la decisión final sea anunciada antes de fin de mes.
