AMSTERDAM, (Reuters).- Un dentista holandés que se cortó un dedo y fingió un accidente de automóvil para reclamar 1.8 millones de euros a su compañía de seguros, recibió una multa y una sentencia condicional de parte de un tribunal.
El hombre, de 50 años, se mutiló a sí mismo y estrelló su coche contra un árbol en Bélgica con la esperanza de convencer a su compañía aseguradora de que el volante le había causado la lesión, afirmó el tribunal.
Sin embargo, la forma del corte de su dedo índice, el nivel de anestésicos en su sangre y la ausencia de marcas de neumáticos en la carretera sugirieron otra cosa.
"No fue un accidente y la amputación se la hizo él mismo, o tuvo a alguien que la hizo por él", comentó un portavoz del juzgado.
El dentista fue multado con 25.000 euros y condenado a seis meses de prisión, conmutables por 240 horas de servicios a la comunidad.